En 2009, la Academia americana desveló las 5 nominadas al Óscar a Mejor Película... y no estaban dos de las cintas más adoradas por crítica y público de ese año, WALL·E: Batallón de Limpieza y El Caballero Oscuro. En lugar de ellas estaba The Reader (El Lector), en su día defenestrada por la crítica e ignorada en taquilla, a día de hoy olvidada salvo por esa nota a pie de página.

El posterior vapuleo de la prensa y los cinéfilos de medio mundo fue lo que provocó que la Academia decidiese ampliar de 5 a 10 el número de nominadas en la categoría reina de sus premios, con la esperanza de que así se incluirían tanto este tipo de blockbusters como otras cintas indies que eran sistemáticamente olvidadas (pensemos en ¡Olvídate de Mí!). Dos años duró ese sistema, y para evitar que se colase también algún The Blind Side, se modificó al sistema que está actualmente, donde el número varía entre 5 y 10 y para ser nominada hay que lograr más del 5% de los votos.


Ahora, según desvela The Hollywood Reporter, la Academia podría estar reconsiderando este sistema y planteándose volver a las 5 nominadas clásicas. O al menos, una facción conservadora de la Academia, que según la publicación, va a presentar esta propuesta en su próxima reunión del 24 de marzo, donde se hace la valoración del año, de la temporada de premios y de la gala de entrega de los Óscar.

La motivación detrás de esta propuesta es triple: por un lado, que tener más nominadas disminuye el prestigio del premio, ya que es más sencillo alcanzar la candidatura que si solo hubiesen cinco puestos; por otro, que la ampliación de las candidatas sigue sin permitir que entren películas comerciales de calidad, como Interstellar o Guardianes de la Galaxia este año, y en cambio provoca que sí que sean nominadas cintas indies que nadie ha visto, como Whiplash, lo que indica que aumenta la desconexión entre la Academia y el público; y por último, y relacionado con esto, que cada vez la gente pasa más de los Óscar porque no conoce las nominadas, y por tanto no ven la ceremonia, que este año ha tenido menos audiencia.

Decida lo que decida la Academia, y es probable que se vote por la vuelta a las cinco nominadas, desde CINeol podemos decir que los motivos expuestos en el artículo y sacados de miembros de la Academia que forman parte de esta facción conservadora, son un sinsentido:

- La Academia debe valorar las películas en función de su calidad, no de su taquilla. Cualquiera que piense lo contrario no se merece formar parte de una institución cinematográfica.
- Ningún cinéfilo con un mínimo de inteligencia tiene en menos consideración a Toy Story 3 respecto a Las Normas de la Casa de la Sidra porque la primera haya sido candidata a Mejor Película en un año de 10 y la segunda en un año de 5. La etiqueta "nominada a X Óscar" es válida por igual, en especial cuando el paso del tiempo difumina el recuerdo de cuántas nominadas hubo ese año.
- Si no hay más blockbusters nominados es porque en general el cine de grandes efectos especiales suele ser entre mediocre y malo. Para un par de películas que haya con calidad suficiente, suelen tener pocas aspiraciones artísticas más allá del mero entretenimiento, lo que no invita a considerarlas para premios serios.
- Parte del valor de los Óscar es descubrir al gran público joyas del cine que pueden pasarles desapercibidas por motivos completamente ajenos a su calidad. Entre las funciones de la Academia debe estar el educar al público en valores cinematográficos, aspirar a ser una institución cultural a la que recurrir como vara de medir. No plegarse al mínimo común denominador.
- Con 5 nominadas no se eliminan las películas que no se merecen ser candidatas y al final se cuelan en la terna. Que se lo pregunten a la mencionada The Reader (El Lector) o a Chocolat. En cambio, sí que se ignorarían muchas joyas que sí que merecen estar aquí.
- Las audiencias televisivas son un pésimo indicador de que las nominadas son merecedoras de serlo. Hay muchos factores que influyen en las audiencias, como el presentador, la previsibilidad de los ganadores, el número de famosos que acuden...
- Que las nominadas sean películas con poca taquilla es algo que debería preocupar a la Academia en tanto que deberían promover que ese tipo de cine se difunda más y mejor. Si Boyhood (Momentos de una vida) ha recaudado una cuarta parte que 300: El Origen de un Imperio, el problema no es nominar a una en lugar de a la otra, sino conseguir que el público redescubra lo que es el Cine con mayúsculas.
- La separación entre arte y comercio, entre cine de calidad y cine de taquilla, es responsabilidad de los estudios y sus sistema de producción. Las nominaciones al Óscar son solo un reflejo de ello.

En resumen: que si quieren volver a las 5 nominadas, que lo hagan. Pero por lo menos que las razones sean de peso, y no meras gilipolleces.