Damned Martian escribió:Un gesto a destiempo porque todo lo que haga ya es a destiempo. Una vez hecho el mal, todo es a destiempo.
Un dinero que no va a aprovechar por razones obvias.
Y lo de la historia, bueno, se nota que no has entendido el concepto de lo que he dicho. No importa. Te queremos igual. Que no es mucho.
¿Y qué hay que entender? ¿La reparación de la vida a través de la ficción manipulada y falaz? Por favor, qué idea tan aburguesada, hueca, inútil y pusilánime, cosa que, bien mirado, no es extraña en Ian McEwan, un mediocre que escribe una novela cómo Sábado, con la que pretende disfrazar la amargura de su vejez y su incomprensión hacia la juventud actual con un montón de tópicos sin fundamento.
Vamos a pensar con la cabeza. Lo más abyecto de este asunto es que desean pasar por bello y poético un gesto de pura autocomplacencia, que a la única persona que le será útil será a Briony, pues empieza y termina en ella misma, no tiene repercusión alguna a pesar que Wright, McEwan o quien sea quiera dar a entender que eso sí repara algo. O es que acaso mentira que...
... ella, hija de familia rica, ha podido vivir una vida larga, que sí, seguro que cuando ha estado de bajona ha sentido remordimientos y se ha puesto triste, pero a cambio, cómo es obvio, ha podido disfrutar de buenas rachas y ha podido viajar, conocer sitios, hacer amistades, follar todo lo que le ha dado la gana, tener hijos, leer y escribir de libros, escuchar montones de discos... y un largo etcétera que es un privilegio del cual ninguno de esos pringaos ha podido disfrutar. Mucha pena de baratillo, pero ella ha podido vivir, aunque sea a rachas más o menos cortas o largas, pero ha podido y eso es más que nada
Por lo tanto con esa historia lo único que hace es calmar su conciencia y ya está. La única vida que intenta reparar es la suya propia. Por mucho que se esfuerce el artifice de esta joya, no podrán saber más que Victor Hugo, que le da a Javert el único final posible a alguien que ha destrozado la existencia de otro, o que Marcel Pagnol, que hace tres cuartos de lo mismo con Papinou en El Manantial de las Colinas. Eso es lo único que nivela la balanza: Yo te he privado del goce de vivir a ti y por lo tanto ahora yo me lo quito a mí mismo de manera irrevocable.
No seamos ingenuos, esa vieja pelleja no se ha pasado 60 años de pena sempiterna.
La 2GM sirve como expresión física de la separación emocional. Si hubiesen hecho una elipsis te hubieses quejado de que no nos mostraban cómo habían sufrido. Quejica.
Si hubiesen mostrado la única escena verdaderamente importante de ese segmento, ya sabes a cuál me refiero, se hubiese comprendido perfectamente por lo que ha tenido que pasar, pero claro, llenando la película de artificios parece más chula y así resulta más sencillo el embaucar a los crédulos e inflar la obra para hacerles pensar que han visto algo trascendental. Por otra parte, esa idea del dolor de la separación física por culpa de una guerra no sólo no es novedoso en el cine, si no que no es novedoso en esta década. Sí, amigo, Cold Mountain. Por mucho que te introduzcan a una niñata repelente de por medio y un discurso vacío sobre la pena, en el fondo, lo que te están vendiendo el mismo perror con diferente collar, el mismo clímax contando del mismo modo.