por kanuac » 22 Sep 2005 16:26
Otra gran película del genio Allen con una trama sobradamente original, dada a la comedia romanticona pero sin ese toque de sarcasmo que es habitual en otras de sus obras.
Las secuencias de drama desequilibran mucho el balance general y el resultado se presta un tanto al desencanto. Al final, uno cree que el personaje de Mia no es más que una ilusa de tomo y lomo.
Papel que, por cierto, Mia Farrow representó a la perfección -si es que ése era el objetivo- como una mujer ensoñadora con la cabeza eternamente en otra parte y de una inocencia fuera de toda duda. Se pasea durante toda la película con esa cara de medio asombro-medio empanada que, pese a todo, es perfecta para la ocasión.
Danny Aiello es uno de mis actores fetiche y siempre lo adoro. Aquí tiene un papel breve pero muy intenso que le permite explorar la faceta de tipo malvado: mala persona y peor marido. Y lo hace con gran acierto, representa a un tipo muy voluble que depende totalmente de su mujer y quien, al fin y al cabo, probablemente sea la fuente de todos los problemas de Cecilia (Mia).
Y llegamos a Jeff Daniels que, insospechadamente, aquí está "en su sitio". Su cara, de rasgos delicados, con 30 años recien cumplidos, desde luego encaja mucho más que el rostro duro y agresivo de Michael Keaton, quien estuvo a punto de quedarse con el papel hasta que Woody vio que no daba el pego en las escenas retro filmadas en B/N.
Daniels, decía, logra aquí la doble personalidad que le toca cubrir, con sencillez y sin forzar los personajes; De manera que uno es más fantasioso y onírico que el otro, y a pesar de salir del mismo actor, no coinciden en nada.
Por cierto, Jeff actúa en mi escena preferida de esta película, justo cuando llega al burdel donde representa este momento fantástico que acaba con las damas prácticamente suspirando por sus huesos. Apuesto a que si Woody hubiera actuado en la película, esta hubiera sido suya y, de hecho, es la clásica situación comprometida ''marca de la casa''. De las que no hay muchas más en el filme, dicho sea de paso.
Decir que "La Rosa púrpura de El Cairo" sea o no una de las mejores películas de Woody no es decir mucho en este contexto. Como director tiene obras maestras, pero realmente todas están en la cumbre y no es de esos realizadores al que se le cuela alguna mediocridad de vez en cuando, véase Spielberg.
Por tanto, simplemente diré que es otro clásico de Allen sin Allen en pantalla.
Por cierto, ya ha comentado más de una vez que ésta es su película preferida de entre todas las que ha realizado hasta la fecha.