Cine. Comandante

[Ninguno]

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[el predicador]

Pues eso; básicamente Oliver Stone entrevista, con mucha mano izquierda, eso sí, al omnipresente mandatario cubano. Un personaje con enjundia, qué duda cabe, y carisma para dar y regalar, aunque dictador mal que les pese a los isleños. Quizá no sea la suya tan insostenible como otros regímenes dictatoriales del siglo XX, pero se trata de una dictadura al fin y al cabo. Por eso precisamente le debe tocar tanto los guebs al imperio; por su resistencia en el tiempo, su voluntad para no doblegarse al cambio. Y por practicar el intervencionismo en la economía, of course

No obstante, la película de Stone resulta quizá demasiado intimista, casi familiar, como para alcanzar plena satisfacción. Aquí cada cual encontrará un poco de todo, y un mucho de nada. La visión de Fidel sobre la caída de Batista, el Ché, bahía Cochinos, los misiles, la desintegración de la URSS... tiene su interés hasta cierto grado, pero no deja de ser un punto de vista subjetivo que no alcanza la profundidad necesaria debido a la corta duración. Otros asuntos menos relevantes, véase los gustos cinéfilos, artísticos o literarios de Castro, sus amoríos o la forma de relacionarse con su familia, los veo más como una anécdota para enmarcar la conversación. Naturalmente, el documental pasa de puntillas sobre asuntos espinosos para el yayo verde oliva, como el impacto de 40 años de bloqueo sobre la sociedad cubana, o los mecanismos de censura ideológica representados en una especie de "policía del pensamiento". Por mucho que digan los progres de este país, La Revolución no les ha salido barata a los cubanos. Como tampoco nos salió barata a nosotros la dictadura franquista.

Si bien resulta un documento interesante por acercar tan importante figura a los espectadores, quizá demasiado benévolamente (tampoco llega al nivel de repugnante panfleto, que conste) no me parece el documental definitivo sobre Fidel Castro y, ni mucho menos, el más completo. Claro que con una mayor imparcialidad es muy posible que Comandante no hubiese existido. Quizá ahí resida gran parte de su encanto.