"Los equipos italianos trabajan muchas menos horas que los estadounidenses", afirma la directora Wells. "Estuvimos sometidos a mucha presión. Tanta que empecé a llamar la película 'Under the Tuscan Gun' (Bajo la pistola de la Toscana)".

La escena preferida de Vincent Riotta es en la que el Signor Martini le cuenta a Frances la historia de los raíles de un tren que se construyeron en los Alpes entre Austria e Italia a pesar de que no había ningún tren que pudiera hacer el trayecto. Lo que Martini le está queriendo decir es que, para que el amor venga, basta con construirle un camino.

A Lindsay Duncan (Katherine) le impresionó el poder de evocación del guión de Wells. Duncan nos lo explica: "Algunos guiones son imposibles de imaginar, pero con éste sólo hace falta leer unas páginas y ya te sientes en la Toscana. En cuanto leí el guión me fui corriendo a alquilar 'La Dolce Vita' porque nunca había llegado a verla entera. Me encantó y después mi marido me la regaló".

La idea de la película se inició en el año 1998, cuando Tom Sternberg estaba produciendo El Talento de Mr. Ripley en Toscana, Italia. Cuando terminó el rodaje, Sternberg fue a una bodega cercana con el director Anthony Minghella y el actor Matt Damon. Allí se encontraron por casualidad con la pareja Frances y Ed Mayes, la primera era la autora del best seller Bajo el Sol de la Toscana.
Dos años más tarde volvieron a encontrarse en una reunión en Los Ángeles y Sternberg se lanzó a producir esta película basada en el libro autobiográfico de Frances Mayes.