Las películas que provocan tales escisiones en el público, las que producen en los espectadores admiración y espanto a partes iguales, las que amas u odias, son las más difíciles de criticar, así que perdón, si no estoy a la altura.

Un claro ejemplo de este tipo de obras, puede que el más claro, es este film. Para bien o para mal David Lynch ha cosechado una serie de películas con un personalísimo estilo, cuajando por ello una maraña de seguidores y detractarores que le profesan la mayor de las alabanzas y los más duras críticas. Puede que su film más personal y profundamente cimentado en sus particulares obsesiones y constantes sea éste.

Mulholland Drive es el nombre de una calle de Los Ángeles, es el lugar donde parece que comienza esta historia. Una mujer, Rita, va en una limusina. El auto se para y encañonan a la chica. En ese momento, un coche los enviste. Ella, amnésica y desorientada, baja colina abajo hasta la ciudad y por diferentes circunstancias, conoce a Betty, una amistosa y bondadosa joven que quiere ser actriz. Ambas traban una amistad e intentarán esclarecer el oscuro y misterioso pasado de Rita.

Es difícil hablar de la sinopsis de Mulholland Drive sin destripar o destrozar sus detalles importantes y de gran enjundia. Solo decir que la película, su concepto y argumento en sí, cambia, a un rato del final, dando un giro de guión, que no te da todas las respuestas y que no "finaliza" la película, sino que deja al espectador con una serie de hechos, caras, personajes que tiene que ir enlazando y relacionando. Y ese es el gran fallo/logro de la película. Si se considera como marca de genialidad o como una paja mental es cosa personal y subjetiva. Yo creo que es más que gratificante ver cómo se hace un tipo de cine diferente y fresco, innovador y brillante, de ese cine que escasea y que hace pensar y mucho al espectador, de ese cine que te regala horas y horas de reflexión. La conclusión a ésto es que, la peli hay que verla más de una vez, para captar toda su genialidad.

Pero más allá de su concepción y entendimiento total hay más cosas grandes y magníficas en Mulholland Drive. Sería erróneo supeditar la calidad global a si se entiendo completamente o no. Sería imperdonable no alabar la tremenda dirección de Lynch, la perfecta narración que aquí exhibe, de ritmo cadencioso, hipnótico, de esas narraciones "lentas" en el mejor de los sentidos. Es primoroso como funde aquí su estilo onírico y surrealista. Lynch tamiza todo el metraje de un lirismo y un dramatismo pocas veces visto, con un par de escenas impagables, como la del Club del Silencio, de un halo poético sobrecogedor, o la escena de sexo entre las dos protagonistas, es increíble y admirable como consigue imprimirle a esa escena, que podía haber sido pura y simplemente erótica, una conseguidísima emotividad.

¿Fallos? Demasiadas pequeñas subtramas. Si se quieren entender al 100% son necesarios un par de visionados más a la cinta. Por ello cuando se entiendan, el fallo quedará erradicado pues. Pero como he dicho antes la genialidad de pelicula está más allá de su total entendimiento.

Digno de mención son las interpretaciones en especial las del dúo protagonista, soberbias Laura Elena Harring y Naomi Watts, probablemente las intepretaciones de sus vidas. Por cierto vaya par de mujeres tan jodidamente guapas. Muy bien secundados por Ann Miller y Justin Theroux entre otros.

Increíble también la banda sonora de Ángelo Badalamenti, turbadora y oscura, muy acorde con la tónica del film.

Una obra maestra, desgarradora, misteriosa, profunda, trágica, onírica, lírica, ciertamente rara, pero una bellísima y fascinante rareza.

9.50/10