Compulsión (2019)
Director: Ángel González
Intérpretes: Susana Abaitua (Fanny) / Marina Esteve (Esther) / Paco Manzanedo (Robert) / Pol Cardona (Javi)
Duración: 71 minutos
Sinopsis: Una tímida joven tiene razones para sospechar que su enigmático novio le está siendo infiel. Decidida a revelar la verdad, descubrirá un siniestro secreto que convertirá su vida en una terrible pesadilla. [...]
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Estreno 10 de Mayo de 2019

CRÍTICA

La ópera prima del director español Ángel González, viene avalada por la presentación en multitud de Festivales menores especializados en el género de terror, lo cual es un incentivo a la hora de acercarse a ella.
Un thriller que bebe de muchas fuentes, pero con pretensión a su vez de obtener personalidad propia.

El inicio es bastante prometedor, intrigante. Una sensual chica se está arreglando, queda con su chico y van a un lugar íntimo. Pronto sabremos que ni él es su chico, y que el lugar íntimo podría resultar aterrador. La escena nos indica ya el inicio del thriller, pero se reserva la violencia y la acción para más adelante…

Al mismo hombre le vemos en una escena posterior en casa con la que, esta vez sí, parece su pareja. Y a partir de aquí comienza el juego donde se entrecruzan las sospechas de infidelidad y el descubrimiento de una particular doble vida de Roberto, similar a la de Abel, el personaje que nos presentaba Jaime Rosales en su particular y estupenda película Las Horas del Día.

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Técnicamente esta película de Ángel González supone una buena carta de presentación. La música perturba adecuadamente, hay buen encuadre de planos y buen ejercicio inicial de montaje y todo parece ir encajando perfectamente en la construcción de un relato aterrador. Un relato que comienza siendo un drama de pareja en torno a una supuesta infidelidad y va derivando en el thriller psicológico que se aventuraba al comienzo.

El problema surge cuando la historia no va a ningún sitio concreto. Cuando el buen trabajo técnico se queda solo en eso, y el guion resulta tan flojo que hace perder intensidad a la película, a pesar de que la película va incrementando su violencia y su crudeza en las escenas, y a pesar también de las buenas interpretaciones del trío protagonista Marina Esteve, Paco Manzanedo y Susana Abaitua.

Como guinda atractiva el final nos deja una escena de cierto impacto y de reflexión social acerca de la naturaleza de un psicópata y de las consecuencias que genera a su alrededor.

Estamos ante una película entretenida, como ópera prima aceptable, pero con mucho margen de mejora una vez se admiten las cualidades técnicas y se echan de menos el resto de cualidades estrictamente cinematográficas y necesarias, para que el terror se combine con otros elementos igual de intereresantes.