La Última Canción
Director: Julie Anne Robinson
Intérpretes: Miley Cyrus (Veronica 'Ronnie' Miller) / Greg Kinnear (Steve Miller) / Bobby Coleman (Jonah Miller) / Liam Hemsworth (Will Blakelee) / Hallock Beals (Scott) / Kelly Preston (Kim Miller) / Nick Searcy (Tom Blakelee) / Kate Vernon (Susan Blakelee) / Carly Chaikin (Galadriel) / Nick Lashaway (Marcus) / Melissa Ordway (Ashley) / Lance E. Nichols (Pastor Harris) / Stephanie Leigh Schlund (Megan Blakelee) / Rhoda Griffis (Doctora) / Anthony Paderewski (Oficial de seguridad)
Duración: 107 minutos
Sinopsis: En contra de su voluntad, una joven que ha perdido el rumbo de su vida se trasladará para vivir con su padre, lo que no será otra cosa que el inicio hacía la madurez y su paso de niña a mujer. [...]
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Estreno en España: 3 de Junio de 2010

CRÍTICA

Lo mejor: Greg Kinnear, Greg Kinnear y Greg Kinnear.
Lo peor: Los estereotipos que rodean el film y los prejuicios que se tengan hacia la protagonista.

Nicholas Sparks es el Stephen King de los dramas románticos. Suyas son las novelas que dieron pie a adaptaciones cinematográficas como Noches de Tormenta, Querido John, Mensaje en una Botella, Un Paseo para Recordar y El diario de Noa. Por ésta última (que le encanta a la señorita Cyrus), es por la que los productores del film le encargaron una novela (lo que hace que el papel sea a medida) que pudiera ser llevada al cine para que la, ex Hanna Montana, la interpretara y se alejase así del fenómeno televisivo que supuso la serie de Disney.

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La historia tiene lugar en una pequeña ciudad costera del sur de los Estados Unidos, donde un padre separado (Greg Kinnear) se dispone a pasar el verano con una reacia hija adolescente (Miley Cyrus), que preferiría quedarse en casa en Nueva York. El padre trata de volver a conectar con su hija a través de lo único que tienen en común… la música.

Julie Anne Robinson es la profesional a la que se le ha encargado llevar a buen puerto la historia. Siendo su primera película es normal que la puesta en escena sea algo simplista y previsible. Aún así aprovecha muy bien el paisaje, a lo que ayuda mucho la fotografía de John Lindley ( que ha fotografiado entre otras Los Fisgones, Mr. Brooks…), la química entre los protagonistas y sobre todo Greg Kinnear.

Aquí es donde la película gana muchos enteros, y es que cada vez que el señor Kinnear aparece en la pantalla… todo cambia. Se hace más real, más creíble, más tangible… incluso la señorita Cyrus actúa mejor. Es admirable como en una película “menor” don Greg Kinnear es capaz de darlo todo, y de interpretar con tanta pasión un rol un tanto simple y manido, por el simple hecho de que es uno de los mejores actores de los últimos quince años.

Ésta variable, en la ecuación de cualquier película, hace que la película mejore. Hace que el niño que interpreta al hermano de Ronnie (un excelente Bobby Coleman) no sólo se pasee por la película, sino que se implique y que conecte con el espectador. Pero además, logra lo que en principio se quería, y es intentar demostrarle al mundo que después de Hanna Montana hay vida para Miley Cyrus. Que si se arriesga (como hace en ésta ocasión, aunque parezca que no) y trabaja duro, puede ser una buena actriz.

La película no engaña a nadie, ya que es obvia la temática y las formas…pero sorprenderá a la gente que le dé una oportunidad (porque es mejor de lo que aparenta) y encantará a los que adoren el material de Sparks…..