ZINEMALDIA 2012. Despedida y cierre

Ya hemos llegado al final de la 60 edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastian, se han entregados los premios, se han marchado las estrellas y las no tan estrellas, y Donosti empieza a volver a la normalidad poco a poco. Pero antes de que la realidad y la rutina vuelva a nuestras vida toca hacer una valoración de lo mejor y lo peor, lo más curioso, extraño, divertido, en resumen, remarcable del festival.
Pero antes de eso vamos a repasar la película de clausura. El cuarteto es el debut en la dirección de Dustin Hoffman, quien a sus 75 años, dirige una historia sobre la inmortalidad del arte y los artistas.

Es una cinta sencilla, sobre la preparación de una gala en homenaje a Verdi en una residencia para antiguas estrellas de la opera. La llegada de una nueva paciente provocará una pequeña revolución en el resto de internos.
Es curioso que para su debut Hoffman haya optado por una comedia 100% británica, producida por la BBC, y en la que es un gusto poder disfrutar una vez más de las actuaciones de Billy Connolly y Maggie Smith. La cinta no es una maravilla, pero es de esos films, como El Exótico hotel Marigold, que tiene todos los ingredientes para triunfar en taquilla, historia sencilla, momentos cómicos, actores en estado de gracia y un público objetivo que no manejan el tema de la piratería.
Una primera película que deja un sabor de boca agradable y sobre la que se espera que Dustin siga evolucionando en futuros proyectos. Además de los aplausos tras la proyección de la película el actor recibió una ovación con el teatro en pie cuando recogió el premio Donosti especial 60 aniversario.
LAS 6 PELÍCULAS MÁS DESTACADAS DEL 60 ANIVERSARIO


El 60 aniversario ha sido una edición que, afectada por la crisis, ha visto como en ninguna sesión se ha colgado el cartel de “completo” con antelación. Han sido muy pocas las películas que han conseguido llenar las salas, aunque si bien es cierto la asistencia de público, aunque menor, no ha sido un desastre del todo. Vamos con el repaso a las cintas que más comentarios favorables se han llevado del público tendríamos que destacar seis películas, de las cuales curiosamente cuatro se encontraban en la sección oficial, lo que indica el magnífico nivel de esta edición:
- Blancanieves. Sí al principio de año hubiésemos dicho que una película sobre el cuento de los hermanos Grimm, con toros, sevillanas, folklore andaluz, dirigida por un director Bilbaíno y encima muda y en blanco y negro iba a ser una de las películas más esperadas del año, probablemente nos hubiesen encerrado en un manicomio. Pero la película es una autentica delicia para los sentidos, es muda, por que los personajes no hablan, pero la banda sonora se encarga de poner en el momento preciso las “palabras” en la boca de los personajes. Para mí la mejor película del festival y deseando estoy de volver a casa y poder verla otra vez en el cine.
- Las sesiones. En un año en el que la sección ZABALTEGI-PERLAS ha rallado a un nivel altísimo, solo una película ha sido votada con menos de un 7 en el premio del público, la cinta de Ben Lewin sobre un hombre, que quedó paralizado de cuello para bajo, tras contraer la polio de pequeño, que decide tener su primera relación sexual, ha sido la que ha despertado mayores aplausos, llegando a poner a parte del teatro en pie después de la proyección. Una historia sencilla que recuerda a Intocable por lo bien que mide la combinación de drama y comedia y como la película francesa el éxito de público y critica en Donosti ha sido tremendo, por lo que seguro que funciona de maravilla en taquilla. Y ojo a John Hawkes y Helen Hunt en la carrera de los Oscar.
- 7 Cajas. Llegó sin hacer ruido y se colocó con un 8,9/10 en la votación del jurado joven. Se proyectó el día de la huelga y la asistencia fue mínima, eso si después de conocerse la nota las proyecciones posteriores se llenaron, la prensa hacía colas enormes para poder acceder a la sala e incluso algunos se quedaron fuera.
La película, proyectada dentro de la sección NUEVOS DIRECTORES , cuenta la historia de Víctor, un carretillero del mercado de Asunción, que se verá involucrado en un crimen y una persecución de la que él no sabe nada, cuando le hacen la propuesta de transportar 7 cajas a través del mercado.
La cinta que bebe directamente del cine de Quentin Tarantino, con mucho humor negro, situaciones bastante rocambolescas y personajes excesivos, basa sus puntos fuertes en su potencia visual, muy cercana al estilo de Danny Boyle y al buen ritmo en el desarrollo de la trama. Una autentica sorpresa para todos, a pesar que la película ya ganó el año pasado el premio de cine en construcción en Donosti.
- Dans la Maison. François Ozon volvía a San Sebastian después de dejar un sabor agri-dulce con su anterior película en el certamen, Mi Refugio, que recibió el premio especial del jurado, a pesar de ser abucheada por ciertos sectores del público. Pero esta vez el francés se puso su traje de gran director y con un guión hipnótico ha construido una película casi perfecta que tras su primera proyección se proclamó como la cinta a batir de cara al gran premio final, pero llegó la clausura, y ningún film ha conseguido estar tan bien en tantos aspectos, técnicos y artísticos. Una concha de oro aplaudida por todos, cosa que rara vez pasa en un festival de cine.
- Lo imposible. Una de las películas evento del certamen, arrasó en su estreno mundial en Toronto y desembarcaba en San Sebastian como un tsunami, al que acompañaba la presencia de Ewan McGregor para recoger su premio Donosti. La película no defraudó, si bien es cierto que un sector de la crítica la tachó de tramposa y sensiblera, el público la acogió con ovación, y algún que otro desmayo, en la gala de la noche, la proyección tuvo que ser interrumpida para poder sacar de la sala a una persona en camilla. Pero estas anécdotas no nublaron los comentarios sobre la película, de la cual se seguía hablando días después de presentarse. Está claro que el boca-oreja le va a proporcionar un éxito seguro de taquilla.
- Argo. Y llegamos a la autentica locura del festival, quizás la única película de la que se hizo casi imposible hacerse con una entrada poco después de ponerse a la venta. El buen hacer de Ben Affleck tras las cámaras, una historia interesante y sobre todo los rumores de Oscar que han surgido desde su paso por Toronto hicieron que las expectativas por Argo subieran como la espuma. Y por suerte las expectativas se cumplieron de sobra, Ben Affleck es un tipo listo que sabe lo que le gusta al público, es capaz de hacer una película con una actualidad brutal, por las tensiones entre Irán y Estados Unidos, envolviéndola con un manto de thriller palomitero, intenso y magníficamente dirigido y rodeándose de auténticos pesos pesados de la interpretación para darle todavía más empaque a la cinta. El resultado, una película vibrante a la que el publico donostiarra aplaudió dos veces durante la proyección y ovacionó una vez terminado el film. Y una demostración que para hacer cine comercial, no hace falta tratar al espectador como a un estúpido, ni para hacer buen cine hay que ponerse gafapasta.

Todas las fotos en la galería de fotos del 60 Festival de Cine de San Sebastián.
Además, en la sección ZABALTEGI-PERLAS tuvo bastante repercusión la última película de Michael Haneke, Amour, otra de las pocas películas que agotaron entradas anticipadas. Había muchas ganas de ver lo que había hecho el director alemán, y por las notas recibidas en las votaciones del público parece que consiguió conectar con la gente, aunque a un servidor le dejó algo frío. Lo contrario que me pasó con Volver a nacer, película a la que toda la critica abucheó, y a mí sin parecerme una gran película, si que me parece una película de aprobado. Se comenta que Sergio Castellitto estuvo en el pase de prensa del film, y que salió bastante enfadado con las reacciones de la prensa durante la proyección de la cinta.
NUEVOS DIRECTORES Y NUEVOS GÉNEROS

Dentro de una edición plagada de estrellas y de buen cine, José Luis Rebordinos volvió a reivindicar los géneros puros dentro de los festivales, más acostumbrados a los dramas o como mucho a alguna comedia.
Este año, al igual que el anterior con Intruders, ha optado por proyectar películas de terror como The bay, en ZABALTEGI-ESPECIALES, Animación, Asura o Le jour des corneilles, Thrillers como El hipnotista, en SECCIÓN OFICIAL e incluso alguna película con gran contenido sexual como Klip. Estos movimientos hacia un cine distinto, sin esa etiqueta de festivalero, sirve para acercar más el cine a todo tipo de públicos y nos descubren diferentes maneras de contar una historia.
Si bien el nivel de las películas ha sido notable, si que es verdad que en la sección NUEVOS DIRECTORES, no ha habido ninguna película que destacase en exceso sobre las otras. Y ninguna de las vistas, me parece excelente, como si pasaba en otros años.
Además es curioso que la película vencedora, Carne de perro, y una de las menciones especiales, Parviz, tienen en común el poco diálogo, y que en mi opinión la dos están demasiado alargadas para lo que cuentan, por no hablar que, sobre todo en el caso de la primera, había películas mucho mejores en la sección. Pero al tratarse de un premio otorgado por un jurado, no siempre es fácil que elijan la película que más gusta al público.
Mi favorita de la sección era Silent City, de la que hablé en la crónica del primer día, y si bien es verdad que ha habido películas muy curiosas como A caretaker's tale o la vencedora del premio del jurado joven 7 Cajas, me han parecido un puntito por debajo de la película holandesa, que tiene una protagonista que si hubiese competido en sección oficial, podría haberse llevado la concha de plata a mejor actriz con total seguridad.
En la sección HORIZONTES LATINOS, donde coincidían nombres ya premiados en el pasado festival de Cannes, ha habido momentos para todo, desde la profundidad, incomprensión, amor y odio, que genera Carlos Reygadas, en cada una de sus películas, presente este año con Post Tenebras Lux, hasta el acercamiento al rey del rock, en El último Elvis, que resultaría al final ganadora del premio, pasando por la ganadora de la critica de Cannes, Aquí y allá, y por la desenfadada Joven y alocada, que sin ser una gran película, si que sirvió de maravilla para desconectar y reírse un rato dentro de la vorágine festivalera.
MENTIRAS Y GORDAS Vs. EL MUNDO

Además de para reírnos, Joven y alocada nos sirvió como retrato de una parte de la juventud chilena, este acercamiento a los jóvenes lo hemos podido ver en otras películas como la israelí Six acts o la serbia Klip, con un denominador común, todas parecen una versión adaptada a cada país de la española Mentiras y Gordas.
A diferencia de la película española y aunque el nivel tampoco sea muy superior al de la cinta interpretada por Mario Casas, estas nuevas “versiones” me las creo más y me parecen menos impostadas, más reales. Mientras que Klip es más poligonera, choni y explicita, Six acts, es más recatada en cuanto al sexo explicito, aunque siempre esté presente.
Pero no han sido las únicas películas que se han basado en la adolescencia o juventud, para desarrollar sus historias. Io e te, Animals o Après Mai, son tres visiones distintas en forma y contexto social e histórico. Si la película de Olivier Assayas nos trasladaba a los meses posteriores a la revolución cultural de mayo del 68, Bernardo Bertolucci y Marçal Forés tienen en sus películas a personajes actuales, con enfoques y desarrollos totalmente distintos que van desde realismo del italiano a los elementos fantásticos del español.
También es curioso que la mejor recibida haya sido la película del director veterano, y es que Bertolucci consigue rejuvenecer su cine con esta película que supone de momento una más que notable despedida para el artífice de films como El Último Emperador, Novecento o El Último Tango en París.
DESPEDIDA Y A POR LA 61

Todas las fotos en la galería de fotos del 60 Festival de Cine de San Sebastián.
Y así el festival fue pasando entre buenas y menos buenas películas, entre aplausos y algunos silbidos, bostezos matutinos y ojeras que demostraban la falta de sueño. Ha habido decepciones, y alguna sorpresa agradable y si bien las estrellas extranjeras han cumplido su función de darle algo más de glamour al festival, si que se ha echado de menos a gran parte de los nombres importantes de nuestro cine, sobre todo en la clausura que quedó algo desangelada después de haber vivido unos días tan intensos en cuanto a visitas de celebrities.
Destacar la simpatía de Dustin Hoffman con la prensa y los fotógrafos, el buen hacer de John Travolta, Benicio Del Toro e Ewan McGregor con sus fans. Han formado cientos de autógrafos y se han hecho muchas fotos con los seguidores que les esperaban a la salida del hotel, a la entrada de la rueda de prensa o en cualquier sitio donde se rumorease que iban a aparecer.
Un poco menos receptivo se mostró Tommy Lee Jones, al que algunos seguidores le reprocharon el hecho de que no firmase ningún autógrafo. Al final Jones, en la alfombra roja de la gala de entrega del premio, aconsejado por su esposa, se mostró mucho más accesible y simpático con los seguidores.
Sobre los premios del jurado poco hay que decir este año SÍ que han acertado en todos los premios, y aunque para mi hay tres categorías en que tenía otros favoritos, no me parece que los que lo han ganado no se lo merezcan.
Han pasado 10 días desde que empecer a escribir mis impresiones y experiencias, tanto dentro de una sala de cine como fuera, en este Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Pocas cosas quedan ya por añadir. Ya en casa, habiendo descansado y mientras todavía sigo dándole vueltas a algunas películas que se quedan rondando en la cabeza, voy pensando en la vuelta a la rutina, al día a día, el trabajo y los atascos. Y me paro a pensar y recuerdo con cariño los momentos pasados en esta última semana y a pesar de las prisas, los agobios, los artículos que no terminan de escribirse, las estrellas que no acaban de llegar, las pocas horas de sueño, las legañas en las sesiones de la mañana, las huelgas, la saturación de películas, los debates e incluso las discusiones, el hecho de que termine el festival, siempre provoca una tristeza indescriptible.
Pero bueno, el año que viene el Zinemaldia volverá, y mientras llega recordaremos los buenos momentos, la gente que hemos conocido, las películas que hemos disfrutado, las que hemos odiado. Y seguiremos mejorando para que CINeol siga creciendo, y podamos estar en la 61 edición, un año al que le pediremos que aunque no pueda haber el mismo número de estrellas que este año, al menos sí mantenga el nivel de calidad exhibido.
Esperemos volver a finales de septiembre de 2013 a Donosti y haceros llegar un año más la emoción y sensaciones del festival a vuestra casa, pero hasta entonces, y como siempre, nos vemos en el cine.