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Ghost Rider. El Motorista Fantasma
El propio Nicolas Cage incorporó a su personaje el que le gustaran las gominolas y la música de Karen Carpenter.
La moto del motorista fantasma está modelada a partir de la chopper Harley que montaba el personaje de Fonda en Easy Rider. Fonda hace en esta película de Meristopheles.
El propio Nicolas Cage era fan del cómic homónimo, tanto que hasta lleva un tatuaje del personaje principal que tuvieron que maquillarlo para poder rodar la película.
La calavera que luce el motorista fantasma es la de Nicolas Cage, le fue tomada con rayos X.
La escena en la que el motorista fantasma cruza el desierto quemando a un réptil por el camino es idéntica a la que también protagonizó Nicolas Cage en Arizona Baby, solo que en aquella el réptil no se chamuscaba.
La escena en la que Blaze sufre el accidente del principio fue real. Con limitaciones, claro, el especialista no salto todos los camiones, pero si cayó mal por la rampa y se golpeó con la rueda delantera en la cara. Mark Steven Johnson decidió mantener la toma en la película. El especialista no resultó herido.
Sam Elliott, en el film el enigmático Caretaker, ha sido siempre un actor vinculado a los westerns. Su elección para el personaje tenía un propósito: homenajear la primera versión del cómic de "Ghost Rider", aparecida a finales de los años 40, y en la que el personaje era un cowboy vestido de blanco.
Mark Steven Johnson utilizó referencias al cine de superhéroes, de terror de la Hammer y a dos films emblemáticos de Sergio Leone, "Por un puñado de dólares" y "Hasta que llegó su hora", del que recuperó el modo de rodar un primer plano de Henry Fonda para realizarlo casi idéntico con su hijo Peter.
En un principio el director iba a ser Stephen Norrington, pero salió del proyecto.