Portada>Noticias>Especial Óscar 2016: Mejor Actor

Especial Óscar 2016: Mejor Actor

user avatar

Evelio Barbero, 12/02/2016

Buena se ha liado este año con lo de los 'White Oscars'. En un país donde el tema racial sigue creando serias discrepancias, el hecho de que este año no haya habido ningún representante negro en ninguna categoría actoral ha creado una seria crispación que la entrega de los premios del sindicato de actores trató de aplacar de forma poco disimulada.
Sin embargo, si nos ceñimos a los premios de consideración, ya sea de crítica o de la industria, cuesta encontrar en esta categoría menciones a esos actores que Spike Lee y compañía consideran discriminados: Michael B. Jordan, protagonista de Creed. La Leyenda de Rocky, que apenas ha ganado dos premios; y Will Smith, uno de los más activos a la hora de criticar las no-nominaciones, pero cuyas menciones por La Verdad duele se reducen a la crítica de Denver y los habituales buscadores de glamour, los Globos de Oro (donde además, entre drama y comedia la cifra de candidatos aumenta hasta 10). Vamos, que igual la Academia no es racista. Más motivo de queja tendrá Paul Dano, quién entre principal y secundario ha estado muy presente en los premios de la temporada por Love & Mercy y a la hora de la verdad ha quedado fuera de la carrera del Óscar.
Los cinco finalistas representan a dos personas reales de gran repercusión en el siglo XX, dos versiones noveladas de personas reales nacidas en el siglo XIX, y un quinto, muy del siglo XXI, al que habría que preguntar directamente a la NASA si está basado en algún suceso real que no han querido contarnos hasta la fecha.


BRYAN CRANSTONTRUMBO
(1ª nominación)

A punto de cumplir los 60 y con más de 35 años delante de las cámaras, su vida cambió considerablemente en 2008, cuando fue elegido para protagonizar Breaking Bad, interpretando a ese profesor de química en un instituto que por necesidades de la vida acababa convirtiéndose en el mejor cocinero de metanfetamina de Nuevo México. Durante seis años dio un recital de interpretación, mostrando un crecimiento constante y una amplia gama de registros que no sorprende que se viera recompensado con un Globo de Oro, 4 Emmys, 2 Critics’ Choice y 2 SAG. Lo sorprendente es que antes de todo esto, si había gente que le conocía por algo, era por encarnar al padre de Malcolm, personaje cómico que se movía en términos bastante surrealistas.
Ahora sí, después de conocer la fama y la gloria por poner cara a Walter White, es fácil reconocer a Bryan en papeles pasados, algunos apenas anecdóticos, en cintas de cierta repercusión como Salvar al Soldado Ryan, The Wonders o Pequeña Miss Sunshine, o apariciones esporádicas en series tan conocidas como Canción triste de Hill Street, Falcon Crest, Los vigilantes de la playa o Seinfeld, de la que precisamente recreó una escena con Julia Louis-Dreyfus en la gala de los Globos de Oro de hace dos años. Lógicamente, su reciente éxito televisivo le ha abierto las puertas a cine más popular y papeles más llamativos. Las nuevas versiones de Desafío Total y Godzilla, la bien acogida Drive o la multipremiada Argo, contaban en mayor o menor medida con su ya inestimable presencia.
Este año es la primera vez que ha optado a los premios del cine más importantes por ponerse en la piel de Dalton Trumbo, escritor y guionista estadounidense perseguido por la caza de brujas del senador McCarthy, incluido en una lista negra que le llevó, entre otras cosas, a tener que firmar parte de sus trabajos con seudónimos o directamente sin acreditar y llegando a ganar dos Óscar que no pudo recoger por estar vetado.
A FAVOR: El suyo es un personaje a reivindicar por la Academia. Más allá de la interpretación de Bryan, el personaje es toda una reivindicación de las libertades e igualdades tan cuestionadas por ciertos sectores a colación de esta gala. Tanto ruido alrededor le puede beneficiar de alguna forma.
EN CONTRA: Aunque ha estado nominado en todas las ceremonias importantes del año, su palmarés se reduce a un premio menor de la crítica. Es posible que este año la Academia quiera saldar cuentas pendientes, pero todo apunta a que va ser con otro actor presente en la gala. Además, su película no ha sido particularmente celebrada por la crítica.

Ganador: Southeastern.
Finalista: SAG, Globo de Oro, BAFTA, Critics' Choice, San Francisco, Kansas, Florida, San Diego, Iowa, Phoenix, Austin, Houston, Denver, North Carolina.


MATT DAMON - MARTE (THE MARTIAN)
(3ª nominación / 0 Óscar)

Exceptuando a Michael Fassbender, Matt tiene una curiosa conexión con el resto de nominados de este año. Bryan Cranston aparecía en la conversación del alto mando militar que decidía que había que Salvar al Soldado Ryan. Eddie Redmayne interpretó a su hijo en El Buen Pastor. Y con Leonardo DiCaprio compartía el doble juego que daba título a Infiltrados. En lo que se distingue de todos es en tener ya una estatuilla con su nombre y no como actor, sino como guionista junto a Ben Affleck de El Indomable Will Hunting.
Aquella película le supuso también una nominación como actor por aquel personaje rebelde con traumas psicológicos que en secreto era todo un portento en matemáticas y lo que se le pusiera por delante. Y aquí podríamos hablar de otra conexión. Fue el año que Leo no fue nominado por Titanic y el premio fue para un Jack Nicholson, por Mejor... Imposible, con el que ambos protagonizaron la citada cinta de Scorsese. Doce años tuvieron que pasar hasta el segundo intento, pero el título de su película no fue precisamente premonitorio. En Invictus daba vida a François Pienaar, capitán de la selección de rugby de Sudáfrica que, con su victoria en el mundial celebrado en su país, ayudó a la unidad de un país separado por la segregación racial. En esta ocasión, su aspiración de estatuilla se topó con Christoph Waltz y los Malditos bastardos. Al final sí tenía cierta conexión con Fassbender.
Hay cierta coña con la pasta que se ha gastado su país en rescatarle en varias ocasiones. En Salvar al Soldado Ryan pusieron en peligro la vida de un pelotón para poder enviarle a casa con vida. En Interstellar moviliza a toda una misión de la NASA hacia un planeta remoto con falsas informaciones, solo por su interés. Y con Marte (The Martian), cinta por la que vuelve a ser nominado, ocurre algo muy parecido, aunque en este caso no es culpa suya que los que le abandonaron tengan que dar un pequeño rodeo de millones de kilómetros para salvarle el cuello una vez más. Matt le insufla tanto carisma, pasión por la ciencia y sentido del humor a su personaje que es difícil echarles en cara el esfuerzo.
A FAVOR: Aunque pueda parecer un trabajo menor comparado con el de sus compañeros de nominación, hay que reconocerle que coge un personaje que podría resultar pedante y, sin aparente esfuerzo, consigue que disfrutes compartiendo con él 150 minutos de película. Su cinta llega arropada por otras seis nominaciones, entre las que se incluye mejor película y guion, así que tiene un buen acompañamiento.
EN CONTRA: Aparte del favoritismo de Leo, la Academia no suele premiar en categorías importantes a las películas fantásticas. Ni tampoco se decanta por actuaciones donde no exista una dosis de sufrimiento, intensidad, transformación física o temática profunda o de actualidad. No se gana un Óscar siendo natural.

Ganador: Globo de Oro, NBR.
Finalista: Premios CINeol, BAFTA, Critics' Choice, Satellite, Washington, Crítica Online, Dallas, St. Louis, San Diego, Ohio, Utah, Phoenix, Houston, Georgia, Denver, North Carolina.

LEONARDO DICAPRIO - EL RENACIDO
(5ª nominación / 0 Óscar)

Siendo aún adolescente interpretó con gran credibilidad a un disminuido psíquico en ¿A quién ama Gilbert Grape?. Fue de sus primeros trabajos y hubo quién creyó que su deficiencia era real, pero Tommy Lee Jones recibió más votos por su papel en El Fugitivo. Once años después volvió a estar nominado por su magistral interpretación en El Aviador, dando vida a Howard Hughes, legendario millonario excéntrico, inventor, apasionado del cine, mujeriego y maniático hasta la exageración, pero Jamie Foxx y Ray Charles se cruzaron en su camino. Dos años después regresó con Diamante de Sangre. Su papel de traficante de armas que ve vinculado su destino al de un esclavo que ha encontrado un diamante muy valioso recibió elogios, pero no tantos como Forest Whitaker por El Último Rey de Escocia. Hace dos años lo intentó por partida doble, como productor y como actor por El Lobo de Wall Street, ofreciendo un catálogo de registros que iban desde la ingenuidad inicial, pasando por la arrogancia y la seguridad que otorga el éxito a gran escala, y rematando con la depravación en estado puro, y todo en una misma película. Pero llegó Matthew McConaughey, su sida y su lucha contra el sistema sanitario estadounidense y le dejó otra vez con la miel en los labios.
Y eso solo contando las veces que ha estado nominado. Porque bien podría haberlo sido también por películas como Titanic (su categoría fue de las pocas donde no tuvo representación la cinta de James Cameron), Atrápame si Puedes, Infiltrados, Revolutionary Road o Django Desencadenado, por citar solo algunas. Méritos desde luego ha hecho para haber conseguido al menos una vez el preciado galardón.
¿Qué más se puede hacer para conseguirlo? Pues parece que esa misma pregunta se la podría haber hecho cuando aceptó protagonizar la última película de Alejandro González Iñárritu. Un drama basado en la historia real de un trampero del siglo XIX, que después de ser dado por muerto y abandonado por sus compañeros de expedición, lidió con toda una odisea para tratar de llegar con vida hasta la civilización. El papel ya de por sí tiene suficiente chicha para optar a premios, pero a eso hay que añadir el rodaje infernal que tuvo que soportar todo el equipo, expuesto durante meses a unas condiciones extremas que bien pocas estrellas de Hollywood habrían estado dispuestas a soportar.
A FAVOR: Este año, por fin, parece que todo. Los grandes precursores de los Óscar ya le han coronado y lo extremo de su personaje delante y detrás de las cámaras es un caramelo que no se puede dejar pasar. Además, su película parte como una de las grandes favoritas de la noche. Como dato añadido, esta vez no hay posibilidad de que ningún oriundo de Texas se lo arrebate como en las cuatro ocasiones anteriores.
EN CONTRA: Que finalmente El renacido no cumpla las expectativas y pierda potencial a última hora, pero aunque ocurra, él sería el último afectado. O que los votantes tengan remordimientos y pretendan demostrar su solidaridad por la libertad de expresión de Trumbo o la transexualidad de La Chica Danesa.

Ganador: SAG, Globo de Oro, BAFTA, Critics' Choice, Chicago, Boston, Washington, Dallas, St. Louis, Las Vegas, Kansas, San Diego, Ohio, Oklahoma, Utah, Phoenix, Nevada, Georgia, Denver.
Finalista: Satellite, Crítica Online, San Francisco, Florida, Londres, Toronto, Iowa, Detroit, Austin, Houston, North Carolina.


MICHAEL FASSBENDER - STEVE JOBS
(2ª nominación / 0 Óscar)

Si somos estrictos, el gran descubrimiento de Malditos bastardos fue sin duda Christoph Waltz. Así lo reconoció crítica y público y las diversas asociaciones de premios que agasajaron al flamante nuevo fichaje de Quentin Tarantino. Pero aquella película contenía más revelaciones interpretativas, como Mélanie Laurent (aunque viendo su trayectoria posterior parece que aquello fue apenas un destello) y Michael Fassbender. Antes ya había pasado por la serie bélica Hermanos de sangre (que, a pesar de su calidad, no tuvo calado en un público mayoritario) y era uno de los aguerridos espartanos de 300. Sin duda fue su colaboración con Quentin lo que le puso en el escaparate y le permitió acceder a papeles más interesantes y a directores bien considerados.
Uno de ellos es Steve McQueen, con el que se ha convertido en una especie de actor fetiche al haber trabajado en sus tres largometrajes hasta la fecha: Hunger, donde interpretaba a un activista del IRA que se declara en huelga de hambre; Shame, en la piel de un adicto sexual que bien le pudo conceder su primera nominación al Óscar; y 12 Años de Esclavitud, la gran triunfadora de hace dos años, donde sí fue nominado por su papel del sádico dueño de una plantación de algodón. Si aquel año Leo se topó con McConaughey, Michael fue eclipsado por su compañero en Dallas Buyers Club, Jared Leto.
Pero no solo de McQueen vive el hombre y en estos últimos años ha sabido rodearse de nombres ilustres. De la mano de Ridley Scott ha protagonizado El Consejero y ha entrado en el universo Alien apareciendo en Prometheus (y se le espera en posteriores secuelas). Ha pasado con nota el haber rejuvenecido un personaje tan icónico como el Magneto de Ian McKellen en las nuevas entregas de X-Men. Ha protagonizado una nueva versión de Macbeth y tiene pendiente de estreno la nueva película de Terrence Malick. Y con Danny Boyle a la dirección y Aaron Sorkin al guion, ha conseguido una nueva nominación por interpretar a Steve Jobs, el visionario empresario informático que introdujo grandes aportes al mundo de la tecnología, hoy ya casi imprescindibles para todo el mundo. Un personaje con sus luces y sus sombras, megalómano y antisocial pero al mismo tiempo humano y pasional, para que un actor como Fassbender le saque gran rendimiento.
A FAVOR: La influencia que el propio Jobs ha dejado en buena parte de la sociedad puede ayudarle a ganar votos más allá del reconocimiento a su interpretación. Es un actor que está creciendo en reputación y esta es una buena ocasión para reconocérselo.
EN CONTRA: Llega con menos apoyos de los esperados. Ni dirección ni guion en una cinta que pretendía ser emblemática muestran un poco las sensaciones generales que ha dejado su película. Y por supuesto el hecho de que DiCaprio sea el principal favorito.

Ganador: Los Ángeles, Crítica Online, Iowa, Phoenix, Austin, Houston, North Carolina.
Finalista: SAG, Globo de Oro, BAFTA, Critics' Choice, Satellite, Chicago, Southeastern, Washington, San Francisco, Dallas, Kansas, Florida, Londres, Londres*, Toronto, Ohio, Detroit, Georgia, Denver.
*Como mejor actor británico.


EDDIE REDMAYNE - LA CHICA DANESA
(2ª nominación / 1 Óscar)

El vigente ganador y único del quinteto que sabe lo que es subir a dar las gracias a la Academia. Si Fassbender es uno de los actores al frente de una nueva hornada de actores, Eddie no le anda a la zaga. O solo le ofrecen guiones interesantes o tiene buen ojo eligiendo proyectos. Su corta trayectoria hasta la fecha así parece indicarlo. Aunque sus primeros pasos fueron más discretos, en lo que llevamos de década su carrera va lanzada hacia las alturas.
Su primera prueba de fuego fue con la miniserie Los Pilares de la Tierra. Producida por los hermanos Scott y adaptando el best seller de Ken Follett, su papel protagonista dentro de un reparto coral se vio lastrado por la poca pasión que despertó el conjunto. Pero al año siguiente le tocó un personaje más amable en Mi Semana con Marilyn, y al siguiente le vimos hasta cantar y nos sorprendió por su calidad vocal en Los Miserables. Ambas cintas tuvieron su representación en los Óscar, aunque no por el papel de Eddie en ellas. Bien hubiera podido.
Para eso tuvo que esperar solo un año. El cine nos ha mostrado varias veces grandes interpretaciones sostenidas sobre cambios físicos drásticos o kilos de maquillaje. Eddie lo llevó más allá en su interpretación de Stephen Hawking, pasando por toda una fase de metamorfosis física recreando todo el proceso degenerativo del famoso científico. Su trabajo recibió un más que merecido Óscar y este año vuelve a por la reválida. Otra vez por un personaje real (más o menos, porque el film se inspira en una versión en formato novela que se alejó bastante de la persona en la que se basaba). Otra vez con transformación física incluida. Otra vez dotando a su interpretación de una humanidad y carisma considerable. Un homenaje a la primera persona documentada que se sometió a cirugía para cambiar de sexo.
A FAVOR: Un nuevo recital interpretativo con el añadido del componente humano de la historia real. Si la Academia busca contestar a las críticas haciendo un acercamiento a un colectivo poco representado, aquí tiene una buena ocasión.
EN CONTRA: La película ha despertado tan poco entusiasmo como le ocurría a Trumbo, y su interpretación también ha sido criticada por algunos como excesivamente histriónica (aunque eso no es algo que le suela importar a la Academia). Pocos precedentes hay de un actor que gane dos años seguidos: habría que remontarse a los 90 cuando Tom Hanks hizo doblete con Philadelphia y Forrest Gump. DiCaprio este año parece imparable, y Eddie no ha ganado absolutamente nada.

Finalista: SAG, Globo de Oro, BAFTA, Critics' Choice, Satellite, Chicago, Washington, Dallas, St. Louis, Kansas, Florida.
GANARÁ EL ÓSCAR: Leonardo DiCaprio.
PODRÍA GANAR: En serio, Leonardo DiCaprio.
PODRÍA GANAR (si de verdad odian a Leo): Bryan Cranston, porque muchos votantes conocieron al Trumbo real.
SI HAY UNA SORPRESA, SERÁ: Matt Damon, por simpatía acumulada.