Swingers, una boda exprés y una niña huerfanita

En su afán por reflotar el negocio hostelero de Enrique, Maxi decide alquilar el bar a un club de intercambio de parejas para que celebre una fiesta privada. Engañado por Maxi, el concejal de Juventud y Tiempo Libre del Ayuntamiento acude al evento desconociendo por completo las intenciones de los demás invitados. El propio conserje del “Mirador de Montepinar” se presenta en la fiesta junto a Nines, a quien ha convencido previamente para que se haga pasar por su mujer, al igual que el matrimonio Recio, ilusionado con la idea de hacer nuevos amigos.
Por otra parte, Raquel se esfuerza en buscar una pareja para su prima Nines, de quien desea librarse a toda costa. En esta ocasión, la víctima resulta ser Leo, el vicepresidente de la comunidad, a quien Nines ve cómo el hombre que le permitirá regresar a su anterior vida de esposa mantenida.
Los graves problemas económicos de los Cuquis llevan al matrimonio a pedir a Sergio una oportunidad para que su hija Carlota participe en la exitosa serie de televisión que él protagoniza. Poco después, sale a la luz el extraordinario talento interpretativo de la pequeña, así como su insoportable carácter.