Llévatelo, es mío / Mujeres de vida alegre

Alberto, el ex marido de Doroti, lo ha perdido todo, y vuelve al lado de su antigua mujer, buscando apoyo y consuelo para su desgracia. Pero cuando dicho consuelo lo encuentra en Blanca, Doroti se enfada muchísimo con su amiga. Por otro lado, Sofía y Rosa deciden poner un negocio de bocadillos para vendérselos en la playa a los turistas. A continuación, un fumigador descubre en la casa de Blanca un montón de bichos, y las cuatro mujeres han de irse a un hotel para que puedan fumigar. Lo malo es que eligen uno que se dedica a la prostitución y acaban teniendo problemas. Finalmente, el hecho de que Blanca haya conseguido tres invitaciones para asistir a una fiesta de Antonio Banderas hace que Sofía se sienta discriminada por ellas, y haga lo que sea para poder asistir.