Charlie (Michael Caine) es un ladrón que sale de la carcel y al que le espera una gran bienvenida por parte de sus colegas, a parte de eso, un viejo amigo llamado Beckerman (Rossano Brazzi) le ha dejado un regalo despues de su muerte, un film en el que cuenta el próximo golpe, robar cuatro millones de dólares en oro que los chinos van a dar de fianza a la italiana FIAT por la construcción de una fabrica cerca de Pekin. Pero la mafia está al corriente, ahora tienen dos problemas, robar los lingotes sin ser capturados y no toparse con la mafia.