Prisioneros de la tierra

En 1915, un contratista viaja a Posadas en busca de mano de obra para trabajar en el campo. La forma en la que esto se hace dista de ser limpia y legal. A algunos se les emborracha, a otros se les engaña firmando documentos que les endeuda con la compañía. Cuando ya se ha terminado el proceso de selección, el contratista se lleva consigo a los trabajadores en un viaje en barco.
Entre el pasaje viaja un médico alcohólico acompañado de Andrea, su hija, quien confraterniza con uno de los trabajadores y despierta así los celos del contratista.