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Los Mundos de Coraline
El libro que adapta la película ha servido de inspiración para un cortometraje realizado por tres cineastas italianos; un espectáculo de marionetas de una compañía irlandesa; una obra de teatro de una joven compañía sueca; una novela gráfica de tapa dura, y un musical off Broadway que se estrenará en la primavera de 2009.
18 meses antes de que el libro de Neil Gaiman se publicase (en 2002) éste ordenó a su agente que le mandará una copia a Henry Selick, del que podía decirse que era admirador.
Al cabo de una semana Selick quería hacer la película.
La preproducción comenzó en 2005.
La animación stop-motion siempre estuvo en el pensamiento del director, aunque él y Bill Mechanic consideraron la posibilidad de la animación digital e incluso usar actores de carne y hueso. Pero Henry Selick decidió que “era la historia perfecta para la animación stop-motion”.
El proceso de animación stop-motion es muy especializado. Los animadores manipulan fotograma a fotograma los objetos (personajes, atrezo, decorados, etcétera) en una plataforma de trabajo. Se fotografía cada fotograma para la cámara de cine. Cuando se ensamblan y proyectan las miles y miles de fotografías, los personajes se mueven con fluidez y continuidad. Es magia cinematográfica hecha a mano.
Filmar una película de animación stop-motion tiene muchos parecidos con un rodaje convencional: hay que construir decorados; se debe peinar a los personajes, maquillarlos, vestirlos, iluminarlos... y dirigirlos.
Las sesiones de grabación de Dakota Fanning eran filmadas con cámara digital. Explica: “Si hacía cualquier cosa, un gesto, un movimiento, podrían añadirlo al personaje de Coraline”.
La única sugerencia que hizo Neil Gaiman para el casting fue la de Dawn French para dar vida a una de las solteronas, y lo hizo porque French ya había participado en la versión inglesa del audiolibro de Coraline y "estuvo genial".
Wybie Lovat y su abuela son los únicos personajes que no pertenecen a la obra de Neil Gaiman y que decidió incluir Henry Selick para que Coraline pudiera compartir los sentimientos de todo lo que piensa.
Es la mayor producción realizada hasta ahora en animación stop-motion, y la primera en 3-D estereoscópico.
Tomando en cuenta que cada elemento debe hacerse a mano, era necesario toda una semana para realizar 74 segundos de película.
Fabricar un muñeco para el filme ha requerido el trabajo de unas diez personas durante 3 ó 4 meses.
El rodaje duró 18 meses y la preproducción, dos años.
Se crearon 28 muñecos diferentes de 25 centímetros cada uno para el personaje de Coraline.
Fueron necesarios nueve cambios de vestuario para la protagonista. Como mínimo, se hacen seis trajes de cada modelo. De las partes del cuerpo más frágiles, como las manos del Sr. Bobinsky, se realizan varios ejemplares porque “es lo primero que se rompe en los muñecos, a pesar de los alambres que llevan dentro".
Otra dificultad fue crear el pelo de los muñecos, Henry Selick quiso que, por primera vez en la historia del stop-motion, los personajes lucieran melenas aparentemente naturales en vez del habitual pelo esculpido. Hubo que experimentar con diferentes tipos de pelo humano, animal e incluso espumillón.
Se tardó 66 días en animar la secuencia del Circo de Ratones Saltadores en el Otro Mundo, con 61 personajes ratoniles perfectamente coreografiados.
Para crear el increíble follaje y las flores del jardín de la Otra Madre, se utilizó materiales cotidianos, como pelotas de pimpón (dentro de las flores) y alambre.
En una secuencia, Coraline cambia 16 veces de expresión en 35 segundos.
El animador de Coraline tenía la posibilidad de escoger entre 207.336 expresiones diferentes.
La Madre de Colarine disponía de un total de 17.633 combinaciones faciales.
El proceso de rodaje en 3-D se realiza con una sola cámara que fotografía dos veces el mismo fotograma, una vez para el ojo derecho, otra, para el izquierdo.
Se fabricaron 40 árboles a mano para el huerto.
Fueron necesarios 117 metros cuadrados de pelo falso para hacer las veces de hierba.
Los lirios del jardín son dedales de silicona pintados a mano.
La nieve está hecha con pegamento y bicarbonato.
Se usaron palomitas de maíz enfriadas y pintadas para imitar los cerezos en flor.
El único cuero suficientemente fino para los zapatos de los muñecos y las botas del Sr. Bobinsky procede de antiguos guantes de la era victoriana.
La empresa de mudanzas Ranft Bros. se llama así en honor a dos artesanos de la animación, los hermanos Jerome y el fallecido Joe Ranft.
Los billetes con los que se paga la mudanza llevan un dibujo de la cara del director Henry Selick.
Las zapatillas de mono que lleva el Otro Padre son una referencia a Monkeybone, de Henry Selick.
La yema de huevo que la Otra Madre pone en un cuenco se transforma en la imagen de Jack Skellington, el protagonista de Pesadilla Antes de Navidad.
Los discos en el despacho del Otro Padre son de The Rockets, la banda de Harry, el hijo de Henry Selick, y de la suya, The Sharks, además del animador principal Travis Knight haciendo de “Chilly T”.
El gran almacén Linden se llama así por el jefe de producción Harry Linden.
La voz de la libélula pertenece a Emerson, la hija de Teri Hatcher.
George, el hijo de Henry Selick, dobla a uno de los niños fantasma.
Harry, el otro hijo del director, dobla a uno de los amigos de Coraline que vemos en la foto que cobra vida en el Otro Mundo.