Cinco minutos de gloria

Es una historia de ficción inspirada en dos personas reales: Alistair Little y Joe Griffen.

La película nació por suerte. La mujer del productor Eoin O'Callaghan iba a representar una obra de teatro en una un prisión donde conoció a Alistair Little, que trabajaba allí. El resto fue escuchar y encontrar a un buen guionista.

Para que Liam Neeson participará en el film puso la condición de que el rodaje no se demorará más de 3 meses. Y así se hizo, lo que estaba contemplado en seis se hizo en tres.

Se rodó en pueblos cercanos a Belfast, pero no en la misma capital porque los hechos que se narran, sucedidos hace más de 30 años, no casaban con la identidad actual de la ciudad.

La escena de la pelea fue tan real que los dos protagonistas, Liam Neeson y James Nesbitt amanecieron a la mañana siguiente llenos de moratones.

Aunque tuvo la oportunidad de conocer al verdadero Alistair, Liam Neeson prefirió no hacerlo antes de rodar. «Cuando interpretas a una persona real hay una presión añadida para hacerlo bien o para captar la esencia de esta persona. No vi a Alistair hasta el último día de rodaje, y era lo que quería"

A diferencia de su compañero, ya de entrada James Nesbitt quiso conocer al verdadero Joe Griffen.