Camino a Guantamo es la historia de cuatro amigos británicos que en septiembre de 2001 viajaron desde Tipton, en las Midlands inglesas, para asistir a una boda y para unas vacaciones en Pakistán. Tardaron dos años y medio en volver a casa. Su viaje los llevó desde Tipton hasta Karachi, Kandahar, Kabul y Kunduz, donde fueron capturados por la Alianza del Norte (formada por distintas facciones de grupos armados unidos por el objetivo de derrocar al régimen talibán) y luego pasaron a manos de los estadounidenses, que los condujeron a Kandahar. Desde allí, tres de ellos (Shafiq, de 23 años; Asif y Ruhel, ambos de 19 años) fueron trasladados a la base norteamericana de Guantánamo, en Cuba, donde permanecieron más de dos años prisioneros, sometidos a incontables humillaciones y torturas. El 5 de marzo de 2004 fueron trasladados al Reino Unido. En Londres, tras ser interrogados, fueron puestos en libertad sin cargos.
El rodaje fue en cierta forma improvisado. Los actores que daban vida a los personajes reales leyeron las transcripciones de las entrevistas que dieron lugar a la película y sobre ellas basaban sus interpretaciones. No tenían un diálogo establecido para unas escenas que sí estaban preparadas. Se les planteaban unas situaciones y ellos reaccionaban improvisadamente.