Películas>Buscando un beso a medianoche>Extras
Buscando un beso a medianoche
Después de haber filmado las primeras 70 páginas del guión en tan sólo nueve días, el equipo era consciente de que ésta sería una película especial. Alex Holdridge comenzó a montar las secuencias y la magia brotó de la pantalla. Tan pronto como el equipo vio el montaje, hubo que tomarse una decisión para conseguir más dinero y completar la filmación del guión original.
Se volvió a convocar a todo el equipo un mes más tarde para rodar dos semanas más. Con determinación renovada, el elenco y el equipo técnico trabajó 20 horas al día para finalizar la película.
Un día el equipo se reunió para rodar la escena de Vivian en el motel. Alex Holdridge y Robert Murphy habían planeado todos los planos en el interior. Sin embargo, una vez que el dueño del hotel se percató del decorado –botellas vacías de licor y botes de pastillas con prescripción- echó a patadas a todo el mundo y amenazó con llamar a la policía. El equipo recogió mientras el productor Caplan encontraba otro hotel en la misma calle y reservaba una habitación. Noventa minutos después la escena se había montado y rodado en una nueva habitación hotelera… justo cuando el manager del hotel ya amenazaba con llamar a la policía por idénticas sospechas.
La película se rodó sin los permisos municipales correspondientes, de modo que tenían que rodar con cierto disimulo. Para poder comunicarse con sus actores, Holdridge les llamaba por teléfono y les daba las indicaciones mientras que los escuchaba por unos auriculares.
El equipo técnico de la película estaba reducido a la máxima expresión. La mayoría de días tan sólo lo formaban el director, Alex Holdridge, el director de fotografía y el asistente de Holdrige y en los días más "bulliciosos" (que fueron un par) habían dos personas más.