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A Todo Gas 2
En la carrera por ver quien consigue el tan preciado paquete del señor Verone, situado en un Ferrari requisado en un depósito, Brian irrumpe con su Mitsubishi Lancer dentro de dicho depósito, llevándose por delante una señal de stop. El poste de dicha señal le destroza el paragolpes delantero. Segundos después el paragolpes aparece totalmente intacto.
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Los kilómetros recorridos con el coche son exactamente los mismos justo al empezar la carrera del principio de la película que cuando acaban la carrera y escapan.
