La fiesta de los Goya

El sábado por la noche se entregaron los Premios Goya 2015. Los que visteis la gala, o si lo habéis leído aquí, ya sabéis que fue una noche con pocas sorpresas y que La Isla Mínima cumplió las predicciones y fue la clara ganadora de la noche con 10 cabezones en total.
Desde su pase en el Festival de Cine de San Sebastián, la película de Alberto Rodríguez ha ido acumulando premios, desde ese primer Feroz hasta los Goya, y todavía quedan algunos por repartir como los Fotogramas o los de la Unión de Actores.
En los Goyas todo dura mucho, desde las casi 3 horas de photocall a las casi 4 horas de gala, la verdad es que es un palizón. Sobre la gala se ha hablado mucho. Buenas críticas para Dani Rovira, que además ganó su Goya al actor revelación por Ocho Apellidos Vascos (pleno para los actores de la película española más taquillera de la historia), pero en general, la gala fue eterna, llena de rellenos innecesarios y agradecimientos eternos hasta bien entrada la madrugada. Al parecer hizo buena audiencia, con lo que parece probable que vuelvan a recuperar los sábados como día Goyas. Pero creo que deberían cambiar la estructura, quizás aprovechando la gala de nominados para repartir algunos de los premios y reducir los entregados… Si el guión duraba 2 horas y 40 minutos y se fue a 4 horas, habría que pensar en un guión de hora y media y poco más.
Os invito a que volváis a ver el número musical con el que se inició la ceremonia y que leáis el discurso de agradecimiento de Antonio Banderas, quien recibió el Goya de Honor de manos de Pedro Almodóvar. Muy bien escrito, muy bonito.
Tanto Relatos salvajes como Ida ganaron sus Goyas respectivos a Mejor Película Iberoamericana y Europa y competirán en los Óscar el próximo 22 de febrero.
Alojarte en el hotel de Goyas da pie a anécdotas como encontrarte con María León en el ascensor y comentar sus ganas de enfundarse el vestido y que empiece ya, y que los nervios de esta vez eran distintos a los de la anterior aunque nunca desaparecen. O coincidir en el hall abarrotado de gente viendo el derby con los equipos de las pelis, actores, presentadores; hasta Enrique González Macho andaba nervioso, creo que más por el partido que por la gala. Impresión: 'El Niño' de calle no es para tanto, pero de esmoquin, ¡¡¡ayyy!!!
En el photocall pocas anécdotas y mucho frío. Tanto ellos como ellas lucieron guapos y elegantes, salvo alguna excepción que podréis juzgar en la galería. Ellas con escotes y taconazos de vértigo; entre ellos, este año ganó claramente la pajarita.
La noche acabó con una fiesta ofrecida por la Academia donde la gente aprovecha para las felicitaciones, para charlar y bailar, y donde no faltan las fotos con los Goyas de los ganadores, que sí, pesan mucho. Bueno, y más que queda bajo secreto de sumario...
Un privilegio volver a ver unos Goyas de primera mano y mi agradecimiento a los encargados de prensa, siempre pendientes de que todo esté organizado y al detalle.
Podéis visitar la Galería de los 29 Premios Goya para ver más fotos.