This Is Not a Burial, It's a Resurrection

Mantoa, una anciana de 80 años, habita en Nazaretha, un pequeño pueblo situado en los montes de Lesotho, dónde aguarda el regreso de su hijo, que trabaja como minero. Es lo único que le queda en la vida tras haber enterrado previamente a su marido y sus nietos. Al cabo, las noticias que llegan son desgraciadas: su hijo ha fallecido.
Esta mala noticia no llega sola, pues su pueblo, por orden de las autoridades, será anegado por las aguas para construir una presa en su valle. En Nazaretha la importancia de la tierra es esencial, pues no sólo les proporciona las cosechas que permite que nadie en el pueblo se vaya a dormir con hambre, también tienen enterrados ahí a sus muertos, los más antiguos fueron depositados en esas tierras en tiempos de la Peste Negra y dio lugar al nacimiento del pueblo. Decidida a no abandonar a sus muertos, toma la iniciativa para convencer a sus vecinos para que protesten contra la decisión del gobierno.