Erase una vez un rey y una reina que esperaban con alegría el nacimiento de su primera hija, a la que llamarían Aurora. Para celebrarlo, organizaron una fiesta a la que invitaron a todos los habitantes del reino. Pero se olvidaron de invitar a la malvada bruja maléfica que, enfurecida, lanzó un terrible hechizo sobre la princesa: el día de su decimosexto cumpleaños, se pincharía con el huso de una rueca y moriría. Pero sus tres divertidas hadas madrinas descubren una forma de romper el maleficio: no morirá, permanecerá dormida hasta que un valiente príncipe la bese.