Bloody Friday

Klett, un matón mujeriego, es rescatado del juzgado por dos cómplices y pronto comienza a planear el gran robo de un banco local, equipado con un arsenal de armas de alto calibre que ha conseguido de un puesto militar estadounidense. Junto a su leal protegido, quien acepta a regañadientes la participación de su joven novia y el hermano desertor de esta, el cuarteto se embarca en un plan, supuestamente infalible, para hacerse con un millón en efectivo y una nueva vida en Australia. Como era de esperarse, todo se desmorona rápidamente en cada paso del camino.