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ZINEMALDIA 2010. Día 7. Jornada para olvidar

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charlyr2d2, 24/09/2010

Llegamos al antepenúltimo día de competición, las quinielas ya están en boca de todo el mundo y las conversaciones por toda la ciudad giran en torno a qué película, actor, director o actriz merecen llevarse los premios. Todo ocurre mientras de reojo se miran las películas que quedan por venir y las posibilidades que éstas tendrán de alzarse con algún premio importante. Aunque si todo sigue como hasta ahora, pocas sorpresas nos vamos a encontrar, y más viendo las propuestas del día de hoy.

La primera película en entrar a concurso ha sido Amigo, último trabajo del buen director y mejor guionista John Sayles. La película gira entorno a Rafael Dacanay, cabeza del barrio de San Isidro, en un área arrocera de Luzón, Filipinas. Su hermano Simón, jefe de la guerrilla local, ha obligado a la Guardia Civil española a retirarse de su avanzada, y encarga a Rafael que encarcele al capitán de la guarnición y a un fraile español, el Padre Hidalgo, en nombre del gobierno revolucionario. Pero cuando las tropas americanas que iban tras el general Aguinaldo llegan, el oficial español y el Padre Hidalgo son liberados, y una guarnición al mando del teniente Ike Compton permanece para 'proteger' el barrio.
Una propuesta interesante y ambientada en una época poco explotada por el cine americano, ya que como comentaba Sayles en la rueda de prensa, sólo una película americana se había ambientado en la guerra de Filipinas. Sayles esta vez realiza un mejor trabajo tras las cámaras que como guionista, ya que a pesar de la cuidada factura y el gran trabajo de cámara, el filme posee importantes problemas en el ritmo, provocando que durante su parte intermedia se produzca una ralentización en el desarrollo que hace pensar que con un recorte hubiese quedado una cinta notable.
Pocos aplausos y poca expectación en el pase matutino de la película. Aunque han sido todavía menos los que nos hemos reunido para ver la segunda cinta a concurso del día.

Aita es la última película española a concurso en la sección oficial, y después de verla a uno le asalta la duda de si realmente era necesario este pase. El filme nos muestra una vieja casa deshabitada, al guarda que la cuida, al cura del pueblo, los espacios, los sonidos, las luces y las sombras, el paso del tiempo. En los rincones más ocultos de la casa se revela una historia a la vez íntima y colectiva.
Con una sinopsis así, uno ya sabe que se va a enfrentar a algo difícil de digerir, y así se ha demostrado en la reacción final del público. Estamos ante la película que más silbidos y pataleos ha despertado en el festival. Una propuesta de cine experimental donde largos planos estáticos se presentan ante el espectador, que va descubriendo todos los rincones de la casa. Con una fotografía perfecta, la película no deja de ser una sucesión de cuadros con movimiento o sin él, complementado con proyecciones en las paredes de las distintas habitaciones de la casa. Proyecciones que intentan reflejar el pasado y los momentos vividos por esas paredes.
Sí, no le deis más vueltas, estamos ante un ejercicio de gafapastimo puro y duro que ha provocado una huida en manada de los espectadores y muchos silbidos de los que valientemente hemos aguantado hasta el final.
Pero este año estamos teniendo suerte en una estimable compañera que hace más llevadera la insulsa sección oficial. Se trata de la sección ZABALTEGUI-NUEVOS DIRECTORES que en este certamen está teniendo un nivel realmente alto.

El primer trabajo que hemos podido disfrutar ha sido El Bautizo, película polaca que relata la historia real de un hombre de provincias que, tras delinquir en su pueblo, se traslada a Varsovia. Tiene esperanzas de que cambie su suerte y de dejar atrás su pasado delictivo. Desgraciadamente, pesa sobre él una sentencia mafiosa. Michal busca desesperadamente la manera de salvar a su familia. Unos días antes del bautizo de su hijo, invita a su viejo amigo a ser el padrino.
A pesar de esta premisa de dramón de Antena 3 de tarde de domingo, la película consigue huir de ese estilo gracias a una notable realización y a un guión que va creciendo a medida que avanza el metraje, y que desemboca en unos minutos finales excelentes. La única pega es que el primer tramo de la cinta puede parecer un poco cargante y de menos nivel que la segunda mitad de la película, a lo que se une la sobreactuación del personaje principal y lo repentino del inicio. Pero pasados esos 10 minutos, el debutante Tomasz Schuchardt consigue una actuación que hay que destacar.
La película ha recibido bastantes aplausos en cuanto han empezado a aparecer los títulos de crédito.

Pero la gran sorpresa del día ha sido la colombiana Los Colores de la Montaña, que cuenta la historia de Manuel, un niño de 9 años que tiene una vieja pelota con la que juega al fútbol todos los días en el campo. Sueña con llegar a ser un gran guardameta. Y el sueño parece que se cumple cuando su padre le regala un balón nuevo. Pero un accidente inesperado hace que el balón caiga en un campo minado. A pesar del peligro, Manuel decide no abandonar su balón y, con la ayuda de sus amigos Julián y Poca Luz, intentarán rescatar el balón. Mientras tanto, empiezan a aparecer los signos de un conflicto armado en la vida de los habitantes de la vereda La Pradera.
Carlos César Arbeláez ha conseguido con su primera película contar una dura historia en las montañas de Colombia, donde se suceden los enfrentamientos entre guerrilleros y paramilitares envolviéndola con la ingenuidad, la ternura y la mirada de los niños. Hora y media de película en la que se invita al espectador a reír, emocionarse, formar parte de la pandilla de amigos y sobre todo a recapacitar con la situación actual de los niños. Una cinta que más que comentada, debe ser vista y disfrutada. El filme ha sido recibido con grandes aplausos en todas las proyecciones que se han realizado, y ha conseguido colocarse segunda en el ranking de películas del jurado joven, por detrás de la inamovible Abel.
Mañana hablaremos de las últimas dos películas a concurso, haremos nuestra quiniela e intentaremos ver lo nuevo de Paul Giamatti, que ayer ya se dejó ver por el Zinemaldia. Hasta entonces, nos vemos en los cines.