Portada>Noticias>Venecia 2025 – Día 4: de Jarmusch y una de fantasmas en Orizzonti
Venecia 2025 – Día 4: de Jarmusch y una de fantasmas en Orizzonti
Immaculada PIlar, 01/09/2025
Había un leve temor —o al menos curiosidad— tras la ausencia de Father Mother Sister Brother en Cannes. Afortunadamente, el dúo Jarmusch–Venecia se reivindica este año con un trabajo que confirma: el estadounidense está en forma. Su nueva película llega como una estructura de tres piezas, construidas con calma, humor punzante y observaciones profundas sobre los vínculos familiares. En la sección Orizzonti irrumpió una película que se siente desvinculada de nuestra realidad, tan al margen como hipnótica. Rose of Nevada, de Mark Jenkin, ha tenido su puesta de largo en Venecia y ha dejado huella.
Father Mother Sister Brother, de Jim Jarmusch. Un tríptico sobre soberanía emocional:
- FATHER, con Adam Driver, Tom Waits y Mayim Bialik, impone un tono inicial tenso. El padre se sustenta en la culpabilidad de sus hijos por no dedicarle atención, adoptando una paternidad casi abusiva frente a unos hijos emocionalmente ausentes.
- MOTHER, con Charlotte Rampling, Cate Blanchett y Vicky Krieps, despliega una lección interpretativa. Tres mujeres distantes que apenas se reúnen más que una vez al año para tomar el té. Nada se dice, todo se siente.
- SISTER BROTHER, con Indya Moore, Luka Sabbat y Françoise Lebrun, aborda la reconciliación entre hermanos en el piso vacío de sus padres fallecidos. No conocieron del todo a sus progenitores, pero es evidente el amor que sienten por ellos.
Visualmente y narrativamente, estamos ante un Jarmusch contenido, reflexivo, donde las emociones se acumulan lentamente y recuerda por momentos a Flores Rotas. el trabajo de cámara —firmado por Frederick Elmes y Yorick Le Saux— sostiene ese pulso pausado, y el montaje de Affonso Gonçalves refuerza el crescendo emocional. Podrán decir que es un Jarmusch menor… pero sigue siendo el director que mejor cuenta con silencios y gestos.
Rose of Nevada, de Mark Jenkin (Orizzonti)
La película nos cuenta como en una aldea pesquera olvidada, reaparece un barco desaparecido hace 30 años. Nick (George MacKay) y Liam (Callum Turner) se unen a la tripulación, pero tras una travesía regresan a un pueblo que los reconoce como parte de una tripulación pasada. El tiempo se desdibuja, el presente es fragmentado.
Jenkin firma guion, dirección, fotografía y montaje con estilo propio. Rodado en 16 mm, su textura visual recupera la fisicidad del cine analógico, con grano y colores que explotan en ráfagas visuales oníricas. La banda sonora y el diseño sonoro, construidos por completo en posproducción, alcanzan niveles de abstracción que funcionan como eco emocional y refuerzo dramático. La película se desarrolla entre lo fantástico y lo simbólico, y deja una sensación de trance visual muy difícil de borrar.