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Romance multimillonario en la taquilla americana

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Pau Brunet, 13/02/2012

La taquilla americana vive un momento de oro en lo comercial, con enormes éxitos y cifras generales que son ya un importante crecimiento respecto a hace un año. Solo en este fin de semana se han recaudado 188 millones $, un 26% más que hace un año en estas alturas y que permiten en solo siete semana superar la barrera de los 1.000 millones de $ (concretamente, 1.045) lo que supone un 13,5% más que en 2011. Es una ventaja importante de 125 millones que no parece que vaya a decaer en las siguientes semanas por lo que el colchón de cara a este primer semestre es importante. La aceptación de los estrenos es enorme, semana tras semanas los éxitos se repiten sobrepasando en todos los casos las previsiones, incluso las más optimistas.
Esta semana llegaban cuatro estrenos y todos ellos se han colocado por encima de los 23 millones de $ un hecho más que significativo. Entre los cuatro amasan 131 millones de $, el 69,6% del total de la semana.
El número uno finalmente queda en manos del drama (ultra)romántico Todos los días de mi vida, que recauda 41,7 millones de $ en 2.958 cines, dejando una importante media de 14.100$ por sala. Cifra épica, la sexta más alta en un mes de febrero, y quizás el mayor éxito de este tipo de cine romántico “light” solo superado por los 56,2 millones de Historias de San Valentín. No ha desagradado y su ritmo en estos tres días es suficientemente decente como para esperar que aproveche bien esta semana (con el día de San Valentín por el medio) y pueda llegar suficientemente lejos. Los 100 millones deberían ser una cifra a superar pero este cine no suele tener un gran aguante más allá de los días señalados, y al competencia de la semana que vienen (This means war y la nueva de Tyler Perry) le pueden ir a la contra. Sea como sea, superar los 100 millones sería un dato más que optimista para un producto de 30 millones de $ de producción, con una campaña ultra centrada en el target femenino y parejas, y siguiendo los patrones que Sony ya usó con Querido John.