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Especial Oscars 2007: Mejor Cortometraje de Ficción
Damned Martian, 24/02/2007
[size=5]MEJOR CORTOMETRAJE DE FICCIÓN[/size]
Señoras y señores, bienvenidos a la categoría más impredecible de los Oscar. Predecir los nominados es casi imposible, ya que el único requisito es haber ganado algún festival internacional. Predecir los ganadores no es más fácil, ya que no parece haber una pauta histórica, y su poca popularidad hace casi imposible discernir de cuál se habla más. Además, una diferencia de pocos votos puede ser vital, ya que no muchos de los miembros de la Academia se dignan a ver todas las nominadas en los pases especiales dedicados a ello.
Este año además la categoría es especialmente importante y curiosa para nosotros, ya que DOS directores españoles han conseguido colar sendos trabajos entre las cinco nominadas. A uno de ellos ya lo conocemos de sobra, y al otro seguro que pronto lo conoceremos a fondo. Quizá uno de ellos se venga a España con una estatuilla… tenemos un 40% de probabilidades, ¿no?

Binta y la Gran Idea (Javier Fesser y Luis Manso –productor-)
Binta es una niña de un poblado de Senegal que nos cuenta desde su inocente perspectiva cómo su padre tuvo una idea para mejorar el mundo y cómo su prima convenció a su padre de que la dejase ir al colegio.
En el 2004, la UNICEF reclutó a cinco directores españoles para que realizasen cada uno un corto sobre una de sus cinco prioridades. El film resultante se llamó En el Mundo a Cada Rato, y este corto es el quinto segmento de dicha película, que se centra en la escolarización de las niñas. ¿Cómo es que un corto del 2004 es nominado en el 2006? Personalmente no puedo responder a dicha pregunta, porque las reglas de esta categoría son bastante abiertas a interpretación. Pero lo que sí puedo decir es que es un film tierno, gracioso, lleno de corazón, que explora temas muy serios con una mirada tan dulce como la de la niña que lo narra. Es un bonito cuento lleno de esperanza, lo que para un tema tan potencialmente trágico como cualquiera relacionado con África es como un soplo de aire fresco. Además Fesser consigue darle un aire original a la estructura del relato, lejos del surrealismo de cartoon que ha caracterizado a sus obras anteriores (El Milagro de P. Tinto, La Gran Aventura de Mortadelo y Filemón). Que nadie se extrañe si el lunes nos levantamos con su foto levantando una estatuilla.
A FAVOR: La ternura y optimismo que destila el relato.
EN CONTRA: Los cortos extranjeros siempre lo tienen más duro para ganar.

Éramos Pocos (Borja Cobeaga)
Cuando un padre y un hijo se despiertan y descubren que la madre de la familia se ha marchado, deberán tomar una decisión drástica: sacar a la abuela del asilo para que ocupe el puesto de ama de casa.
Salido de la factoría de “Vaya Semanita”, Borja Cobeaga se enfrenta con este corto a su segundo trabajo como realizador. El primero se llamó, muy apropiadamente, “La Primera Vez”, cuenta también en su reparto con Mariví Bilbao.. y es también un descojone. Por tanto podemos decir que si algo aprendió Borja en el programa de ETB es a manejar con fluidez el humor. En este caso lo utiliza para transmitir un mensaje mucho más profundo de lo que parece, y que entronca directamente con el drama familiar que viven muchas mujeres de hoy en día en una sociedad con una mentalidad menos avanzada de lo que parece. Su envoltorio humorístico y su punch-line final son la guinda de un pastel perfectamente cocinado.
A FAVOR: Su sentido del humor y su forma de transmitir un mensaje sin deletrearlo.
EN CONTRA: Como no lo deletrea, algunos pueden quedarse sólo con el mero “gag”. Además, como pasa con Binta, cuenta con el hándicap de su nacionalidad.

Helmer & Son (Søren Pilmark y Kim Magnusson –productor-)
Un hombre de negocios debe hacer un hueco en su agenda cuando le avisan en el asilo donde tiene ingresado a su padre que el anciano se ha encerrado en un armario.
El corto más desconocido corresponde, paradójicamente, al único de los nominados con experiencia en los Oscar. Magnusson, productor del film, ya fue nominado en esta categoría en 1996 y 1997, consiguiendo finalmente el premio en 1998. En esta ocasión ha ejercido de mecenas para el veterano actor danés Søren Pilmark, que con este corto se lanza por primera vez al campo de la dirección. Como en el caso de Éramos Pocos, se trata de mezclar el humor con un mensaje actual y pertinente en nuestra sociedad (en esta ocasión se centra más en nuestro deficiente trato a los mayores, tema que también toca el corto español pero más superficialmente). Por tanto se puede decir que cuenta con las mismas ventajas e inconvenientes que él, excepto una cosilla: apenas se ha hablado de este film y nadie esperaba verlo nominado, mientras que el corto español se ha llevado ya bastantes premios.
A FAVOR: Su mensaje y su humor.
EN CONTRA: Es el corto del que menos gente habla, y encima es extranjero.

The Saviour (Peter Templeman y Stuart Parkyn –productor-)
Un joven mormón que busca conversos puerta por puerta mantiene una relación con una mujer casada. Cuando ella rompe la relación, él no se conformará… aunque eso vaya en contra de su religión.
Ya dijimos en el artículo sobre los documentales que este año los Oscar han vuelto la mirada hacia los fanatismos religiosos. Este corto es otro ejemplo de ello, ya que sigue las desventuras de un mormón evangélico envuelto en una situación que se opone frontalmente a todo aquello en lo que cree. El resultado es tal que el corto no se sitúa directamente a favor o en contra de la religión ni del ateísmo, sino que critica y alaba aspectos de ambos. Y además, lo hace con una historia muy humana. Eso sí, también es fácilmente olvidable.
A FAVOR: Es simpático y nada pretencioso.
EN CONTRA: Su componente religioso puede echar a mucha gente atrás.

West Bank Story (Ari Sandel)
Dos familias del West Bank de Jerusalén, una musulmana y otra judía, se enfrentan por culpa de sus negocios. En medio de este conflicto, un joven de la familia israelí y una chica de la familia palestina se enamoran.
Si os suena el argumento es porque este corto es una versión de West Side Story (que ya era una reinterpretación de Romeo y Julieta), cambiando las bandas de nativos y portorriqueños de Nueva York por los dos bandos del conflicto de Oriente Próximo, pero manteniendo incluso el género musical (aunque esta vez en tono de comedia). Es decir, que este corto es al tiempo un homenaje al Hollywood clásico y un análisis (superficial y simple, pero con un mensaje de tolerancia encomiable) de la situación entre israelíes y palestinos.. Lo tiene pues todo para conectar con la audiencia, y de hecho casi todos los expertos lo consideran el favorito para la victoria. Lo extraño, sin embargo, es que esos mismos expertos suelen coincidir en que es la peor de las nominadas, aduciendo casi siempre que más allá de la idea de cambiar el entorno de la historia hay poco más que rascar que haya sido aportado por el director. Quién sabe si los votantes pensarán lo mismo… y si les importará siquiera.
A FAVOR: Trata un tema candente desde un punto de vista positivo y optimista, con un mensaje de hermandad.
EN CONTRA: Más allá de cambiar el contexto de la historia, poco más hay de original en él.
Señoras y señores, bienvenidos a la categoría más impredecible de los Oscar. Predecir los nominados es casi imposible, ya que el único requisito es haber ganado algún festival internacional. Predecir los ganadores no es más fácil, ya que no parece haber una pauta histórica, y su poca popularidad hace casi imposible discernir de cuál se habla más. Además, una diferencia de pocos votos puede ser vital, ya que no muchos de los miembros de la Academia se dignan a ver todas las nominadas en los pases especiales dedicados a ello.
Este año además la categoría es especialmente importante y curiosa para nosotros, ya que DOS directores españoles han conseguido colar sendos trabajos entre las cinco nominadas. A uno de ellos ya lo conocemos de sobra, y al otro seguro que pronto lo conoceremos a fondo. Quizá uno de ellos se venga a España con una estatuilla… tenemos un 40% de probabilidades, ¿no?
Binta y la Gran Idea (Javier Fesser y Luis Manso –productor-)
Binta es una niña de un poblado de Senegal que nos cuenta desde su inocente perspectiva cómo su padre tuvo una idea para mejorar el mundo y cómo su prima convenció a su padre de que la dejase ir al colegio.
En el 2004, la UNICEF reclutó a cinco directores españoles para que realizasen cada uno un corto sobre una de sus cinco prioridades. El film resultante se llamó En el Mundo a Cada Rato, y este corto es el quinto segmento de dicha película, que se centra en la escolarización de las niñas. ¿Cómo es que un corto del 2004 es nominado en el 2006? Personalmente no puedo responder a dicha pregunta, porque las reglas de esta categoría son bastante abiertas a interpretación. Pero lo que sí puedo decir es que es un film tierno, gracioso, lleno de corazón, que explora temas muy serios con una mirada tan dulce como la de la niña que lo narra. Es un bonito cuento lleno de esperanza, lo que para un tema tan potencialmente trágico como cualquiera relacionado con África es como un soplo de aire fresco. Además Fesser consigue darle un aire original a la estructura del relato, lejos del surrealismo de cartoon que ha caracterizado a sus obras anteriores (El Milagro de P. Tinto, La Gran Aventura de Mortadelo y Filemón). Que nadie se extrañe si el lunes nos levantamos con su foto levantando una estatuilla.
A FAVOR: La ternura y optimismo que destila el relato.
EN CONTRA: Los cortos extranjeros siempre lo tienen más duro para ganar.
Éramos Pocos (Borja Cobeaga)
Cuando un padre y un hijo se despiertan y descubren que la madre de la familia se ha marchado, deberán tomar una decisión drástica: sacar a la abuela del asilo para que ocupe el puesto de ama de casa.
Salido de la factoría de “Vaya Semanita”, Borja Cobeaga se enfrenta con este corto a su segundo trabajo como realizador. El primero se llamó, muy apropiadamente, “La Primera Vez”, cuenta también en su reparto con Mariví Bilbao.. y es también un descojone. Por tanto podemos decir que si algo aprendió Borja en el programa de ETB es a manejar con fluidez el humor. En este caso lo utiliza para transmitir un mensaje mucho más profundo de lo que parece, y que entronca directamente con el drama familiar que viven muchas mujeres de hoy en día en una sociedad con una mentalidad menos avanzada de lo que parece. Su envoltorio humorístico y su punch-line final son la guinda de un pastel perfectamente cocinado.
A FAVOR: Su sentido del humor y su forma de transmitir un mensaje sin deletrearlo.
EN CONTRA: Como no lo deletrea, algunos pueden quedarse sólo con el mero “gag”. Además, como pasa con Binta, cuenta con el hándicap de su nacionalidad.
Helmer & Son (Søren Pilmark y Kim Magnusson –productor-)
Un hombre de negocios debe hacer un hueco en su agenda cuando le avisan en el asilo donde tiene ingresado a su padre que el anciano se ha encerrado en un armario.
El corto más desconocido corresponde, paradójicamente, al único de los nominados con experiencia en los Oscar. Magnusson, productor del film, ya fue nominado en esta categoría en 1996 y 1997, consiguiendo finalmente el premio en 1998. En esta ocasión ha ejercido de mecenas para el veterano actor danés Søren Pilmark, que con este corto se lanza por primera vez al campo de la dirección. Como en el caso de Éramos Pocos, se trata de mezclar el humor con un mensaje actual y pertinente en nuestra sociedad (en esta ocasión se centra más en nuestro deficiente trato a los mayores, tema que también toca el corto español pero más superficialmente). Por tanto se puede decir que cuenta con las mismas ventajas e inconvenientes que él, excepto una cosilla: apenas se ha hablado de este film y nadie esperaba verlo nominado, mientras que el corto español se ha llevado ya bastantes premios.
A FAVOR: Su mensaje y su humor.
EN CONTRA: Es el corto del que menos gente habla, y encima es extranjero.
The Saviour (Peter Templeman y Stuart Parkyn –productor-)
Un joven mormón que busca conversos puerta por puerta mantiene una relación con una mujer casada. Cuando ella rompe la relación, él no se conformará… aunque eso vaya en contra de su religión.
Ya dijimos en el artículo sobre los documentales que este año los Oscar han vuelto la mirada hacia los fanatismos religiosos. Este corto es otro ejemplo de ello, ya que sigue las desventuras de un mormón evangélico envuelto en una situación que se opone frontalmente a todo aquello en lo que cree. El resultado es tal que el corto no se sitúa directamente a favor o en contra de la religión ni del ateísmo, sino que critica y alaba aspectos de ambos. Y además, lo hace con una historia muy humana. Eso sí, también es fácilmente olvidable.
A FAVOR: Es simpático y nada pretencioso.
EN CONTRA: Su componente religioso puede echar a mucha gente atrás.
West Bank Story (Ari Sandel)
Dos familias del West Bank de Jerusalén, una musulmana y otra judía, se enfrentan por culpa de sus negocios. En medio de este conflicto, un joven de la familia israelí y una chica de la familia palestina se enamoran.
Si os suena el argumento es porque este corto es una versión de West Side Story (que ya era una reinterpretación de Romeo y Julieta), cambiando las bandas de nativos y portorriqueños de Nueva York por los dos bandos del conflicto de Oriente Próximo, pero manteniendo incluso el género musical (aunque esta vez en tono de comedia). Es decir, que este corto es al tiempo un homenaje al Hollywood clásico y un análisis (superficial y simple, pero con un mensaje de tolerancia encomiable) de la situación entre israelíes y palestinos.. Lo tiene pues todo para conectar con la audiencia, y de hecho casi todos los expertos lo consideran el favorito para la victoria. Lo extraño, sin embargo, es que esos mismos expertos suelen coincidir en que es la peor de las nominadas, aduciendo casi siempre que más allá de la idea de cambiar el entorno de la historia hay poco más que rascar que haya sido aportado por el director. Quién sabe si los votantes pensarán lo mismo… y si les importará siquiera.
A FAVOR: Trata un tema candente desde un punto de vista positivo y optimista, con un mensaje de hermandad.
EN CONTRA: Más allá de cambiar el contexto de la historia, poco más hay de original en él.