Cuarto de hotel

Fausto Talponi, Flaminia y Tonino Accrocca forman un grupo de aficionados al cine, y más concretamente al cinema verité, que están convencidos que las historias que valen más la pena contar son aquellos que son auténticas y por eso, a lo largo de un año, han filmado en secreto lo que ocurre en el interior de una habitación de hotel para así captar a la gente común viviendo sus vidas. Sin tapujos.
Con todo el material rodado acuden a Cinecittà para entrevistarse con el veterano productor Achille Mengaroni. Lo que Achille se encuentra es un material realmente escandaloso y pronto se da cuenta que no pueden lanzar un largometraje semejante sin la autorización de sus participantes. Es por eso que los cineastas deberán iniciar una ronda de contacto para revelar la noticia y a la vez obtener el consentimiento, cosa que no será cosa sencilla y todo el mundo querrá manipular su trabajo.