Jennifer Lawrence

Jennifer Schrader Lawrence, nacida en 1990 en Indian Hills, Kentucky, inició su trayectoria profesional con apariciones en televisión antes de consolidarse como una de las actrices más influyentes y taquilleras de su generación en la industria cinematográfica global. Sus primeros pasos en el cine independiente le otorgaron un rápido reconocimiento crítico; en 2008, su interpretación en Lejos de la tierra quemada fue galardonada con el Premio Marcello Mastroianni a la mejor actriz emergente en el Festival Internacional de Cine de Venecia. No obstante, fue su papel protagonista en el drama Winter's Bone (2010) el que marcó un punto de inflexión en su carrera, recibiendo elogios unánimes de la crítica y consiguiendo su primera nominación al Premio Óscar a la mejor actriz, convirtiéndose en una de las intérpretes más jóvenes en optar a este galardón hasta la fecha.

A partir de 2011, Lawrence equilibró el prestigio crítico con el éxito comercial masivo al integrarse en dos de las franquicias más importantes de la década. Interpretó a Mística en X-Men: Primera generación, papel que repitió en entregas posteriores de la saga de superhéroes. Al año siguiente, alcanzó el estatus de estrella internacional al encarnar a Katniss Everdeen en Los juegos del hambre (2012), una adaptación literaria que batió récords de taquilla y redefinió el rol de las mujeres en el cine de acción. Paralelamente a estos éxitos de taquilla, inició una fructífera colaboración con el director David O. Russell. Su actuación en El lado bueno de las cosas (2012) le valió el Óscar a la mejor actriz, así como un Globo de Oro y un premio del Sindicato de Actores.

La colaboración con O. Russell continuó con La gran estafa americana (2013), por la cual Lawrence ganó el premio BAFTA y recibió una tercera nominación al Óscar, esta vez como actriz de reparto, y con el biopic Joy (2015), que le otorgó su cuarta candidatura a los premios de la Academia. Durante este periodo, Lawrence demostró su versatilidad trabajando con directores de renombre en proyectos diversos, como la cinta de ciencia ficción Passengers (2016) y la alegoría psicológica madre! (2017) de Darren Aronofsky, que generó un intenso debate en el circuito de festivales. Posteriormente, protagonizó el thriller de espionaje Gorrión rojo (2018), consolidando su capacidad para liderar producciones de diversos géneros.

Tras un breve paréntesis, regresó a las pantallas con la sátira política No mires arriba (2021), una de las películas más vistas en la historia de la plataforma Netflix, y exploró su faceta cómica y de productora en Sin malos rollos (2023). En esta etapa reciente, Lawrence ha expandido su influencia en la industria a través de su compañía de producción, Excellent Cadaver, centrada en el desarrollo de proyectos cinematográficos independientes y de autor. Dentro de esta nueva fase de su carrera, se ha confirmado su participación y rol en la producción del próximo proyecto de la directora Lynne Ramsay, titulado Die My Love, reafirmando su compromiso con el cine de autor y narrativas complejas.