Shawrelle: Me cago en la mar flipao, creo que tienes razón. Fíjate en sus tetitas, son como picaduras de mosquito, ni siquiera te llenarían la boca.
Maggie: Vi tu último combate. Con la boca contra el suelo parecía que estuvieras mamando.
(Todos se ríen)
Peligro: ¡Como si la lona tuviera tetas! Eh, miradme, soy Shawrelle. Me estoy tirando a la lona. Me estoy follando al suelo.

La gente muere cada día Frankie. Fregando suelos, lavando platos, y su último pensamiento es: nunca tuve mi oportunidad. Gracias a ti, Maggie si la tuvo. Si hoy muere, ¿sabes cuál será su último pensamiento?; creo que lo he hecho bastante bien. Yo así descansaría en paz. (Eddie)

Maggie: Tengo que pedirte un favor jefe.
Frank: Claro, pide lo que quieras.
Maggie: ¿Recuerdas lo que hizo mi papa por Axel?
Frank: ... Eso no puedes pedírmelo
Maggie: No quiero vivir así Frankie. He conseguido tanto... he visto mundo. El público gritaba mi nombre. Bueno, mi nombre no, el puñetero nombre que me pusiste. Pero gritaban por mí. Salía en revistas. ¿Crees que había soñado que pasara? Sólo pesaba un kilo cuarenta gramos cuando nací. Papá decía que luché para entrar en este mundo y que lucharía para salir de él. Es lo que quiero hacer Frankie, y conseguirlo sin pelear contigo. Tengo lo que necesitaba. Lo tengo todo. No permitas que sigan quitándomelo. No dejes que me quede aquí echada hasta que ya no pueda oir gritar a esa gente.
Frank: No puedo. Por favor. Por favor eso no me lo pidas
Maggie: Te lo pido
Frank: No puedo...

Maggie: ¿Viste el combate mamá?
Sra. Fitzgerald: Cielo, ya sabes lo que opino de eso.
Maggie: Lo hice bastante bien.
Sra. Fitzgerald: Perdiste Mary M. No fue culpa tuya por lo que oí, pero perdiste. ¿No querrás perder el resto de lo que te queda?
Maggie: ¿Que ha sido de vosotros?
Sra. Fitzgerald: ¿Y eso qué significa?
Maggie: Mamá, llévate a Mardell y a J.D. Regresad a casa o le diré a este abogado que estabas tan preocupada por tus prestaciones sociales que no firmaste los documentos de la casa. Así que el día que me de la gana puedo vender esa casa y echar vuestros sebosos culos a la calle. Y como volváis por aquí es exactamente lo que haré.

Frank: Ya tengo los billetes, ¿estás lista?
Maggie: ¿Vamos a volar?
Frank: ¿Prefieres conducir?
Maggie: ¿Me lo preguntas a mí?
Frank: ¿Prefieres volar o prefieres ir en coche?
Maggie: Osea que por fin me toca decidir algo...
Frank: Si, es lo que he dicho...
Maggie: Vale. Vamos en avión, volvemos en coche.
Frank: Esa es la cosa más estúpida que he oído jamás. ¿Cómo vamos a hacer eso?
Maggie: Decidía yo...

Frank: Padre, ha sido un gran sermón, me ha hecho llorar
Sacerdote: ¿Que es lo que hoy te desconcierta?
Frank: Ah... lo de siempre, lo de un Dios que son tres dioses.
Sacerdote: Frankie la mayoría de la gente entiende que es una cuestión de fé.
Frank: Es como una mezcla de avena, trigo y pasas metido en una gran caja...
Sacerdote: ¿Estás aquí, delante de mi iglesia comparando a Dios con el muesli? Sólo vienes a misa para aturdirme. Esta mañana no lo conseguirás.
Frank: Pero estoy confuso
Sacerdote: No lo estás
Frank: Sí lo estoy
Sacerdote: Entonces la respuesta es que sólo hay un Dios. ¿Algo más? Estoy ocupado...
Frank: ¿Qué es el Espíritu Santo?
Sacerdote: Una expresión del amor de Dios
Frank: ¿Y Jesús?
Sacerdote: El hijo de Dios. ¡No te hagas el estúpido!
Frank: ¿Pero entonces él que es? ¿Le convierte eso en un semidios?
Sacerdote: ¡Esos no existen gilipollas pagano!

Frankie: Así que es tu cumpleaños, ¿eh?, ¿cuántos años tienes?
Maggie: 32, Señor Dunn, y estoy aquí celebrando que me he pasado otro año trabajando de camarera, que es lo que hago desde los 13, y según usted tendré 37 para poder dar un puñetazo decente, cosa que después de entrenarme durante un mes con este punch y sin progresar, empiezo a ver una realidad. La otra realidad es que mi hermano está preso, mi hermana engaña a la Seguridad Social simulando que uno de sus bebés aún vive, mi padre murió y mi madre pesa ciento cuarenta y dos quilos. Si pensara con claridad volvería a casa, me buscaría una caravana y me compraría una freidora y galletas. El problema es que sólo me siento bien con esto. Si soy demasiado mayor ya no me queda nada. ¿Es suficiente realidad?

Algunos dicen que lo más importante que puede tener un púgil es corazón. Frankie decía: “A un boxeador que solo tenga corazón solo le espera una paliza”

A la gente le encanta la violencia. Cuando ven un accidente reducen la velocidad para ver si hay muertos, son los que dicen ser amantes del boxeo. No tienen ni idea de lo que es. El boxeo es cuestión de respeto, de ganarte el tuyo y quitárselo al contrario.