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Menina Casilda, todos los jueves en los Renoir Princesa (Madrid)

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Staff CINeol, 23/04/2023

Menina Casilda es un filme de carácter independiente dirigida por Eric de Bullay. Todos los jueves a las 20:30 en los cines Renoir Princesa de Madrid podéis ver una película original que no os dejará indiferente, y para muestra os dejamos la crítica de Luis González
Este Jueves 27 de Abril habrá un pase especial donde acudirán los protagonistas y directora de fotografía
La reciente película del cineasta francés Eric du Bellay Menina Casilda se estrenó en los cines Renoir Princesa (Madrid) el 13 de abril en una sala llena hasta la bandera. El próximo pase es jueves 27 de abril, a las 20h30, en una sala dos veces mas grande, signo que la película gusta.
El argumento es el siguiente : 2020, pleno confinamiento del COVID en Madrid, Sara, una joven estudiante en derecho se ve raptada por Diego, un actor que se encuentra desesperadamente solo. El quiere que ella sea su publico, que le de la replica.
El marco narrativo es, por así decir, loco y sencillo: una casa en la que se encuentran dos personas, un hombre joven Diego (Álvaro de Paz) y una mujer aún más joven, Sara (Paula Varela, en su primer largometraje), aislada del resto de la ciudad. Explora esencialmente la relación entre los dos personajes, aunque la obra es mucho más transcendental ya que la acción en el momento del confinamiento más estricto, lo cual necesariamente hace que nos encontremos como espectadores presenciando un huis clos en toda regla, huis clos que todos hemos vivido. Álvaro de Paz muestra una gran gama de registros repasando guiones de sus películas favoritas en su casa-museo, y borda el papel de un Diego acomplejado como hijo de una madre ausente y como actor has been de la pequeña pantalla, su personaje entre ridículo y tierno lleva gran parte de la película sobre sus hombros, pero sólo con el apoyo en espejo de Paula Varela cuya interpretación no admite críticas: un dominio de la gestualidad que respira naturalidad, y una voz grave y aterciopelada que contrasta muy acertadamente con su cuerpo de chica menuda de 20 años. Se añaden al elenco otros dos personajes, Yolanda (interpretada con garbo por Luisa Fernández), y Juanma (padre de Diego, interpretado con lacónica tranquilidad por Juanjo Sanjosé), y por fin una graciosa cartera, como casi único contacto exterior.
Partiendo de la idea original de Éric du Bellay, el guión está escrito por el propio director y por Mario Parra. Más allá de los parlamentos creados ex nihilo para los personajes, los guionistas hacen un uso inteligentísimo de algunos diálogos de clásicos del cine, sembrados a lo largo de la película, y la proeza de haberlos insertado sin que se vean las costuras representa un gran acierto redaccional que debería seducir no sólo a los cinéfilos que puedan reconocer los fragmentos citados, sino a los amantes de los juegos cinematográficos. No me cabe duda de que le gustaría a un Quentin Tarantino, por ejemplo, lo que se ha hecho en esta película con retales de réplicas. Merece la pena resaltar la recreación de El Graduado, donde Diego encarna el papel desempeñado por Dustin Hoffman en la película original y Yolanda, pagada por el padre de Diego para “acompañar a su hijo”, funge de Mrs Robinson. La escena es desternillante, no sólo por la parodia hecha al clásico de Mike Nichols, sino por cómo funciona dentro de Menina Casilda, como momento catalizador. El recurso a Dirty Dancing para otra escena no tiene desperdicio.
Las interpretaciones tanto del los roles principales como de los secundarios son impecables, cada cual en su papel, pero un papel que evoluciona sutilmente según se va desarrollando la relación entre los personajes.
En cuanto al género, cabe destacar que si bien se presenta como una comedia (y cómica es, no de las de reírse siempre a mandíbula batiente, pero con una comicidad muy sutil, que se aprecia la primera vez, y se degusta como plato exquisito al volver a verla una segunda vez), ha ganado el premio de Mejor Thriller en el Silver State Film Festival (Las Vegas, 2022), así como el de Mejor Película en el Weyauwega Film Festival (Wisconsin) ese mismo año, mas dos premios de interpretación para Paula Varela en Dubai y en Zamora. Y es que la película hubiera podido decantarse por varias direcciones desde una obra de suspense, e incluso terror, con todos los acontecimientos escabrosos que se pueden encontrar en películas de secuestros, hasta una comedia en toda regla. Mantiene, eso sí, en vilo al espectador un tiempo, que para cada cual es singularmente diferente, o así lo he podido constatar en las conversaciones post-film: para algunos se afirma la comicidad casi de inmediato y para otros bien entrada la película.
En lo que a largometrajes se refiere es una opera prima de Éric du Bellay, realizador ya de seis cortometrajes y experimentado técnico del cine en Francia. Su apuesta por, no solo dirigir, sino escribir su película en castellano y rodarla en Madrid ha dado un magnífico resultado recomendable no sé si para todos los públicos, pero sí para aquellos que aprecian un cine inteligente sin adornos gratuitos ni banalidades de escritura. Es preciso señalar además que se trata de una película independiente sin los medios de las productoras del cine mainstream. La escasez de medios desde luego no se notan en absoluto y presenciamos una película de gran calidad en todos los sentidos, desde los créditos iniciales hasta la iluminación y técnica cinematográfica.
He tenido que ponerle freno a la pluma para no contar muchas escenas excelentes de la película porque merece ser descubierta desde el misterio de la cámara obscura de una sala de cine, minuto tras minuto, sin desvelar demasiado de esta sorprendente y bella obra, donde se estrena y afirma el director, se luce admirablemente Álvaro de Paz y resplandece Paula Varela con una solidez artística que promete maravillas futuras.
Luis González Fernández
Casa de Velázquez.
Madrid 20 de abril 2023.