En la película hay guiños de todo tipo: Angelica sujeta a su muñeca Cynthia en la cubierta del barco y declara, “Soy la reina del mundo”, en homenaje a Titanic; luego descubre a la muñeca varada en la arena, como la Estatua de la Libertad en El planeta de los simios, y rueda por la arena abrazada a ella mientras las olas rompen sobre ambas... en el más puro estilo de De aquí a la eternidad. Hay también referencias a La tormenta perfecta y a la serie “Gilligan´s Island” cuando el barco en el que viaja la familia Rugrats naufraga.

También hay un homenaje a La aventura del Poseidón cuando Betty de Ville (Kath Soucie) vuelve nadando hacia el barco hundido, como hacía en aquella película Shelley Winters, aunque no sea para salvar a nadie sino en busca de un chupete. Y cuando los Rugrats y sus padres saludan a un cartón de leche sonriente, todos se acordarán del balón de volleyball que se convertía en el mejor amigo de Tom Hanks en Náufrago.

En otra escena Donnie Thornberry imita los movimientos de Chuckie Finster al otro lado de una cascada, haciendo que éste crea que está viendo su imagen reflejada en un espejo. Dice el productor ejecutivo Eryk Casemiro: “Es como aquel sketch de Harpo Marx y Lucille Ball en un episodio clásico de la serie “I Love Lucy”. Los adultos se reirán recordando la vez que lo vieron en televisión y, para los niños que no tengan esa referencia, seguirá siendo algo divertido”.