FOR THE SAKE OF PEACE (Sesión Especial)

De qué va: nos cuenta la historia de Nandege, una joven mediadora de paz, que consigue una débil pero esperanzadora paz entre dos facciones enfrentadas del valle de Kidepo en Sundán del Sur.

Qué nos ha parecido: más centrada en la labor humanitaria de la ONG para la que trabaja la joven Nandege y que dirige Forest Whitaker, que en profundizar en la tragedia que vive Sundán del Sur. El documental es cinematográficamente un tanto pobre, con poco que aportar más allá de la grabación de las circunstancias en las que viven los refugiados de la guerra civil, además de las labores humanitarias que se están realizando. Podría decirse que es un trabajo realizado con el piloto automático con poco que aportar.

De no ser Whitaker el galardonado con la Palma de Oro de honor es muy poco probable que este trabajo se hubiera pasado en Cannes.


LA MAMÁ Y LA PUTA (Cannes Classics)

De qué va: de la historia de amor múltiple del joven Alexandre. Un narcisista y algo infantil joven en pleno momento nihilista: sin oficio ni beneficio, vive a costa de las mujeres en torno a las que centra su vida. Dirigida por Jean Eustache, está considerada una las obras cumbres del cine francés de los setenta.

Qué nos ha parecido: una película tan clásicamente nouvelle vague en su planteamiento visual, en su argumentario y en sus protagonistas (Jean-Pierre Léaud, Françoise Lebrun, y Bernadette Lafont), pero tan moderna y vigente en el tratamiento de lo femenino. La visión masculina que busca a la madre como esposa y a la puta como amante, a poder ser en mujeres diferentes, enfrentada a la realidad de esas dos mujeres emocionalmente insatisfechas y sexualmente frustradas en la mayoría de los casos. Y también las posibles salidas a tomar cuando el hombre toma conciencia de las consecuencias de sus actos.

Una película de 215 minutos (prólogo de otras aún más largas que han de llegar), pero que mantiene un ritmo que consigue mantener el interés del espectador. Unas interpretaciones sobrecogedoras, la fotografía en blanco y negro de la que son responsables Pierre Lhomme, Jacques Renard y Michel Cénet, o el guion y la dirección de Jean Eustache, forman un conjunto tan atractivo como sobrecogedor.

Menos mal que teníamos el clásico, eso sí.


CORTEN! (Seccion oficial. Película inaugural. Fuera de concurso)

Menos terrorífica que los bots (o robots según comentó Fremaux) que han dinamitado la reserva de entradas para las sesiones del Festival. Menos original que la película original en la que se basa, la nipona One Cut of the Dead (con esto ya sabéis de qué va. O deberíais). Y por supuesto con el factor sorpresa perdido de antemano para todos los que vieron la japonesa. ¿Por qué se ha seleccionado la película de Michel Hazanavicius para abrir el Festival? Posiblemente porque los mismos que seremos despiadados con ella nos pegamos unas buenas risas con ella, sobre todo en su segunda mitad.

La película del director de The Artist aporta más bien poco, pero cuenta con una Bérénice Bejo capaz de levantar la escena más insípida y con un sorprendentemente electrónico Alexandre Desplat. Aporta poco, sí. Pero es candidata a convertirse en la comedia un poco naif, un poco gamberra, que deviene en placer culpable. Porque cuando ríes sin la sensación de que se ríen de ti, tienes menos ganas de poner en evidencia que es la sucesora como película inaugural de Annette. Que a partir de ahí pocas películas soportan la comparación. Además, mencionan dos veces a Adam Driver, que este año no tiene película en Cannes pero está igualmente presente.


Puedes seguir las andanzas de Imma Pilar en Cannes en su cuenta de Twitter.