Preferiría que hubiesen tomado la vertiente del humor más desenfadado, o en su defecto, haber explotado de manera completa el lado "serio" de la trama, con más acción. A pesar de la buena factura de la película (vestuario, iluminación, ambientación, etc.), da la sensación de quedarse a medio gas. Tiene momentos curiosos (algún zombie sorprendente), otros divertidos, pero también varios sonrojantes. Además al final
parece que te estén preparando para una batalla campal final con zombies que nunca llega a suceder.
No obstante, para ser la primera película de Jordi Cruz de MasterChef no está nada mal (
).
5-/10