Moderador: Damned Martian
p4dr1n0 escribió:Para mi gusto, horrible y sin excusa.
Las dos primeras son dos clásicos. La tercera suponía un bajón de calidad, pero calcaba -torpemente- el esquema iniciado por las otras dos. Puede ser mala, pero al menos era reverencial y la buena intención la tenía. La cuarta está muy denostada, porque habida cuenta del tiempo que había pasado ya, optó por alejarse del modelo establecido por sus predecesoras y hacer algo más original... la falta de carisma de Worthington y compañía no ayudó, pero para mi gusto al menos tiene algo de calidad.
Esta no. Worthington es Pacino al lado de Jai Courtney y Jason Clarke. De las antiguas se quieren aprovechar. No homenajearlas, no referenciarlas... aprovecharlas comercialmente, y pasárselas por el forro argumentalmente, así de fácil. Las escenas "reinterpretadas" parecen mas de una película "suecada" fan made que un producto profesional (lamentable la mítica escena de los tres punks a la llegada del T800). ¿La esencia? Nada de terror, suspense o violencia, pasamos hasta de los títulos de crédito anteriores, ¿de la musica? Me gustaría saber qué quiere decir exactamente eso de "Executive Music Producer" porque Zimmer se ha lucido. Pasamos del tema de la franquicia durante casi toda la película, pero tampoco hay nada nuevo que lo sustituya.
No entiendo muchas cosas de esta película. No entiendo cómo le das una franquicia como Terminator, en la que cada entrega debería ser un acontecimiento, al tío que hizo "Thor: The Dark World", no entiendo como nadie se para a ver las dos primeras y no ven la angustia, el suspense, la visión pesimista del futuro... o que todos los puñeteros títulos de crédito siguen el mismo esquema, por lo menos. No entiendo cómo tienen la desfachatez de saltarse taaaantas cosas de las películas anteriores...
En fin... sería una película muy flojita si se llamase de otra manera... llevando "Terminator" en el título, me parece inaceptable.
el predicador escribió:Desde que tengo uso de razón, he sido fan de esta saga. De la saga cinematográfica, se entiende (Las crónicas de Sarah Connor me merecen poco respeto y 0 curiosidad). El punto álgido, como muchos de nosotros, fue ver de crío las andanzas del joven John, perseguido y acompañado a un tiempo por asesinos cibernéticos del futuro, con el -todavía- asombroso carrusel de FX desplegados sobre la pantalla para deleite infinito de un servidor. Pero también por las breves y descriptivas disertaciones del Chuache acerca del futuro que nos espera. Tenía datos precisos, sí. Un período de tiranía de Skynet; escueto, pero de consecuencias nefastas para la raza humana. Con una cronología más o menos definida con el paso de las películas [SPOILERS: no leer a partir de aquí si no has visto TODA la saga, Génesis inclusive]:
- 1984. Llegada del primer T-800 y Kyle Reese. Eliminados ambos. Concepción de John Connor.
- 1997. Llegada del segundo T-800 (reprogramado) y el temible T-1000. Eliminados. Posible destrucción de Skynet.
- 2003. Llegada del tercer T-800 (reprogramado, asesino de John Connor) y el T-X. Eliminados. Skynet, o un nuevo programa bautizado como tal, se hace con el control y provoca el "Juicio Final".
- 2018. Eventos sin relevancia en la línea del tiempo, pues tanto Kyle como John sobreviven para seguir formando parte de ella.
- 2029. La Resistencia liderada por John Connor destruye las defensas de Skynet, que para asegurar su supervivencia pone en marcha la primera "Arma Temporal Táctica" (ATT). Envía su unidad de infiltración, el terminator, a eliminar a la madre de su enemigo, sin comprender que esto provocará una paradoja irreversible, pues la lucha encarnizada entre Sarah, Kyle y el primer T-800 acaba siempre con los restos de este último en manos de las autoridades. Para que exista uno tiene que coexistir el otro, y viceversa. El destino de John Connor y Skynet, sus auges y caídas, se encuentran irremisiblemente unidos a través de la noche de los tiempos...
Hasta que Skynet decide romper el bucle, convirtiendo a John en pieza fundamental para su victoria. Según T3, John hubiera muerto a los pocos años -o quizá meses- de haber terminado la batalla final, ejecutado por un T-800 con idéntico tejido orgánico al androide que conoció siendo adolescente. En T. Genesis, este encuentro nunca llega a producirse, sino que es el mismo Skynet encarnado el que proporciona a John poderes cuasi-divinos junto con nuevas directrices. Es ahora cuando Connor y Skynet, líneas paralelas que nunca llegan a cruzarse, se tocan y provocan un terremoto cuántico, una serie de ondas reverberando en la superficie plana del tiempo, que como espejos pueden verse las unas a las otras. Dentro de la ATT, el Kyle del futuro es capaz de recordar su pasado (escondido de las máquinas) y su pasado alternativo (en una casa de campo familiar, donde se visita a sí mismo para advertirse sobre Génesis). Como este futuro ha sido diseñado por Skynet, la letal inteligencia decide mandar más androides para acabar con posibles cabos sueltos. Aparecen nuevos eventos en la línea del tiempo:
- 1973. Sarah Connor es una niña. Sufre el ataque de un T-1000 enviado desde el futuro alternativo de Skynet. Es repelido por el ¿cuarto? T-800, obviamente también reprogramado. Este T-800 tiene datos menos precisos sobre el "nuevo" Skynet, desde su fecha de creación (errónea), el uso de ATTs, el funcionamiento de las mismas, etc. O mucho me equivoco, o este robot no viene del mismo lugar que el T-1000.
- 1984 (alternativo). Toda vez el nuevo Skynet "nació" en 2017, no puede detener sucesos que puso en marcha el antiguo Skynet, pero sí mandar otro T-1000 para que se encargue de Kyle Reese. Para mí es la parte más emocionante de todo el filme, una especie de Geatest Hits de la saga. Respetuosa y que rescata los aires de serie B añeja de la película original, rematándolo con esa especie de ATT pirata que usan para trasladarse al nuevo futuro.
- 2014 (alternativo). Llegada del John Connor reprogramado a Cyberdrain Systems para poner en marcha el nuevo Juicio Final.
- 2017 (alternativo). Llegada de Kyle y Sarah al combate definitivo contra John y Skynet. Con momentos no brillantes pero sí ingeniosos: la participación de J.K. Simmons, la revelación de John (que me comí bien en el trailer) y alguna escena de acción guapa, me parece la parte más convencional de la función, que intenta emular, sin conseguirlo, la espectacularidad de la segunda entrega.
No obstante, pese a los fallos, la falta de medios y algunas preguntas sin respuesta (¿quién diablos mandó al T-800 del 73?), Alan Taylor no sale demasiado mal parado del envite. Tampoco el entrañable Chuache -qué raro se me hace escucharle sin la voz de Constantino Romero-, los voluntariosos Jason Clarke, Jai Courtney y una Emilia Clarke que, pese a su físico, no desmerece el espíritu de Linda Hamilton. Si hay una cosa que me gusta de Terminator es que intenta siempre ofrecer algo nuevo, otra vuelta de tuerca, más allá de que el resultado final acabe siendo mejor o peor. Por mi parte, creo que esta cinta se está llevando demasiados palos, se nota que el estudio no confiaba mucho en ella y que, si en lugar de ajustar presupuesto hubieran tirado más la casa por la ventana, con Christian Bale en el papel de Jason Clarke, unos FX potentes y pulir más el guión, podríamos estar hablando de inmejorable cierre de la franquicia. Se queda en divertida peli de acción y ya.
P.D: sugus de piña para el que llegue al final de este tocho-post.
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