Pese a que Norman Bates me dijo que esta era más floja que la primera entrega, a mí me ha parecido mucho mejor. Quizá es que le haya pillado mejor el punto al personaje, no lo niego, pero creo que también tiene unos golpes de humor más currados, unos cuantos gags de partirse la caja (lo del arco me tenido un buen rato revolcándome por los suelos
) y un estilo magnífico tras la cámara, mucho más pulido y seguro de sí mismo a la hora de usar diversos recursos y de hacer homenajes tanto al cine de la época como a los grandes maestros (con ese final totalmente hitchcockiano, a medio camino de Vertigo y Con la Muerte en los Talones). Vamos, que va menos a lo tonto y más a lo cómico.
7+/10