morneo escribió:Y esa escena en casa de los pedófilos no me ha impactado en absoluto, era de esperar lo que iba a acontencer.
Bueno hombre, pero que algo sea de esperar no quiere decir que no sea impactante. El impacto no es sólo la sorpresa, de hecho a veces el impacto es mayor y más doloroso cuando sucede lo que esperabas. Madre mía, esa escena es tremenda.
A mí me ha parecido soberbia. Comentábamos hollis y yo que le falta "algo" para llegar al nivel de Mystic River que es más sólida, más madura. Lógico si tenemos en cuenta que es la primera película de Affleck. Aun así tiene una sorprendente madurez y plantea un dilema moral que sólo Villano puede resolver con simpleza.
Villano escribió:Con esta pelícual Ben Affleck demuestra que es un director bastante digno, que no brillante, quizá sí demasiado clasicón para alguien de su edad, no obstante estéticamente la película le ha quedado bien, impersonal pero bien. Eso sí, lo que cuenta es increíble. Y por increíble no quiero decir impresionante o impactante, si no que es inverosímil de diccionario. A pesar de su intención realista (por eso como vecinos del barrio te ponen ante la cámara a toda esa colección de personajes a cada cual más desmejorado), en vez de otorgar a sus personajes los diálogos y las reacciones que le tocan para que quede convincente, lo que hace es tirar hacia el marienismo dramático del peor Hollywood, como por ejemplo esa escena en al que presionan a la madre drogata de Amanda y suelta una retahíla de chorradas como "es díficil ser madre, no tengo canguro", etc... y los demás le miran como si fueran cierto o cuando te disparan de golpe y porrazo la escena del "tengo hambre" para demostrarnos lo buena que es en el fondo la aspiradora de nieve
Pues a mí me ha sonado convincente. ¿Crees que esa tía en esa situación no diría esa "retahíla de chorradas"? Claro que lo diría, se preocupa de salvar su culo y se justifica a sí misma. Y la película no pretende en ningún momento que te pongas de su parte. Simplemente te la muestra como es. La escena del "tengo hambre" tampoco pretende eso. Por muy desagradable que nos resulte esta tía es un ser humano y en ese momento recuerda un detalle de la noche del secuestro de su hija. Y se emociona, no te jode, y se preocupa.
Con el artificioso y afectados sentido del dramatismo del señor Affleck, si él hubiera dirigido Infiltrados, en esa escena en que el personaje Di Caprio quiere pedir prozac al personaje de Vera Farminga y le dice algo así como "vaya mierda de ayuda das así lo que conseguirás será otro poli con un tiro en la cabeza", Affleck hubiese retorcido el drama y habría dicho "es díficil ser poli, sabes. No te lo ponen fácil, estás bajo presión y uno llega a un punto en el que no sabe que hacer". Porque los diálogos en esta película suenan falsísimos, sin intentar exprimir un poco la lógica para que la escena quede menos teatral.
Y el guión desde luego no es la octava maravilla, ni siqueira es bueno, deduzco que si la película ha gustado tanto es porque lo que hace es coger un tema sensacionalista que se sabe que toca fácilmente la fibra sensible del espectador medio, el de raptos a menores, y someterlo a una trama repleta de absurdos para que al final, a modo de punto culminante, desemboque en una especie de dilema moral para que la película parezca más trasdencental pero que en realidad sólo es una descarga grotesca de moralina papista de tres al cuarto, forzada para ajustarse a la moral oficial, para que aprendas a ser un buen chico, joven nacional.
Venga hombre, la película en ningún momento te dice "esto es lo que hay hacer". Plantea el dilema, que el personaje solventa de una determinada manera y el espectador tiene que tomar partido. ¿Qué haría yo? La película no pierde de vista que es una elección díficil, casi imposible. El que lo pierde de vista eres tú.