Hacía ya tiempo que andaba de ver esta película y no me ha decepcionado en absoluto. No es de extrañar que viéndola recuerde mucho a la espléndida "Perdición" de Billy Wilder, ya que ambas películas se basan en novelas de James M. Cain (del cual también se adaptó a la gran pantalla "Alma en suplicio", con Joan Crawford, una peli muy recomendable).
Lana Turner es una actriz que casi nunca me ha gustado, pero aqui hace el papel de su vida. Incluso parece haber nacido para ese papel. John Garfield encaja como un guante como ese rudo vagabundo que se enamora perdidamente de esa fatal rubia.
"El cartero siempre llama dos veces" recoge todos los buenos elementos de una película
noir: amor, dinero, engaño, rubias peligrosas, hombres desesperados. Ya desde sus presentación, con un plano espectacular que sube por las piernas de Lana Turner, adivinamos que ella va a ser el fatal objeto de deseo de Garfield......su relación poco tarda en empezar.
La película se podría dividir en dos partes: Una en la cual la relación entre Garfield y Turner se va fermentando, teniendo malignas ideas respecto al marido de ella y otra en la cual se centra en enredos judiciales, engaños y mentiras. Lo mejor de la película es como esa pareja viven envenenados por las dudas, amándose y temiéndose al mismo tiempo.
Aparte hay un detalle en cierto modo fetichista:
La primera imagen que tiene Garfiel de Turner es ese lápiz de labios rodando por el suelo y de igual manera cuando al final se estrellan con el coche y muere Cora, lo último que ve es ese mismo lápiz de labios deslizándose por mano muerta de ella
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En definitiva, una estupenda película noir, con los mejores papeles que jamás han realizado John Garfield y Lana Turner