por Villano » 31 Mar 2008 01:05
Oh, Brian de Palma es observador mordaz, cínico y de cáracter fatalista de la vida americana... claro, claro. Sólo hay que fijarse en el incio, en esa colección de vomitivas estampas de la maravillosa american way of life, rebosante hasta los topes de clichés de los más manidos (¿hacen barbacoas en los jardines porque son felices o son felices por qué hacen barbacoas en los jardines?), con todos los actores haciendo el numerito de perros amaestrados, irradiando un optimismo y un buenrrollismo de forma tan desaforada que queda exageradísimo y termina por hacerse empalagoso hasta la náusea (todo ideal, todo tan feliz, parece imágenes de esos folletines que reparten los testigos de Jeová). Se comprende que, imitando el planteamiento de Tarkvosky, se intente jugar al contraste mostrando primero la vida en la tierra para luego ver la dura vida en el espacio, pero queda tan nauseabundo el resutlado, que el tiro le sale por la culata. Qué horror empezar así, de buenas a primeras y sin estar uno preparado. Pero lo peor es que no termina ahí la inmundicia.
Tras unos minutos de nulo interés, con más estampitas de flower power (el video enviado por Don Cheadle dan ganas de echarse a llorar), por fin se llega a algo que supuestamente debería ser interesante. Y digo supuestamente porque la escena que transcurre en la atmósfera de Marte aparte de ser rídicula (la fila india, ¿trajes que se autropopulsan sólo un ratito?), falla tan miserablemente en su intento por escenificar una escena dura en el plano dramático (contrariamente a lo que se propoen, a mí fue la única escena que me provocó una emoción: euforia) e impresionante en el plano técnico (se ve bastante cutre), que termina por volverse en su contra y deja a la película a la altura del betún ya que es aún más bochornosa que las barbacoas en el jardín de la alegría de la escena inicial, por lo emocionante que se cree que es (con musicitas y cámaras lentas, qué potito).
Entre copiazos a 2001 y Encuentros en la Tercera Frase al final lo que queda es un pastiche paupérrimo con una larga lista de absurdos y escenas algo cochambrosas, que debe ser de lo más triste que le he visto a De Palma, peor incluso que la nefasta La Dalia Negra, demostrando así que con un mal guión De Palma no es capaz de obrar ningún milagro, pues aunque su película contenga planos bastante buenos en el terreno estético, no es capaz de dotarla de algo de vida o de sustancia alguna.
No haré eso tan cruel y obvio de comprarla la película de Kubrick, pero si de verdad alguien quiere ver una buena película de ciencia ficción oscura y con atmósfera, os recomiendo el Sunshine de Danny Boyle infinitamente más conseguido y mejor realizado que este bodrio de tomo y lomo.