Imprescindible. Como cualquier cosa que hace Tim
. No es mi película favorita (porque las que más me gustan son
Eduardo Manostijeras y
Sleepy Hollow), pero está muy cerca (y además tengo una chapa muy guay, que me la compré en Londres). Encima en el DVd se puede disfrutar de dos de sus primeros trabajos (lo que lo convierten en una compra más que recomendada):
Vincent, un cortometraje en blanco y nergo sobre un niño que quiere ser Vincent Price (por cierto, este mejor vedlo en versión original, porque está narrado -¡y en verso!- por el mismísimo actor) y que es maravilloso (muy en la línea de su libro de poemas
La Melancólica Muerte del Chico Ostra) y
Frankenweenie, un mediometraje estrenado como "antesala" a la película, también en blanco y negro, y protagonizado por el niño actor más tierno
de los Ochenta: Barret Oliver (
La Historia Interminable, D.A.R.Y.L.).
Para terminar, os recomiendo otro trabajo muy del principio de su carrera: la parte
oscura de otro film Disney:
Taron y el Caldero Mágico.