Bueno, además de la historia de la bebida energética, que nos deja la imagen de Candela en bikini
, en este episodio ocurren otras cosas interesantes.
Por un lado, Tino se entera de que José Luis tiene su furgoneta pero, como no se la quiere devolver, se va con toda la familia a vivir al bungalow de los marqueses para hacerles la vida imposible. Al final, Sonsoles y Alicia, hartas de la pelea de machitos entre Tino y José Luis, se las ingenian para que hagan las paces y trabajen como socios.
Por otro lado, tenemos le desenlace del episodio anterior, con Sandra contestando "no" a la petición de matrimonio de Ángel, que se preocupa por el asunto porque, aunque era una petición ficticia, la respuesta no fue la esperada, lo que deja a Paulino encantado de la vida pinchando a Ángel sin parar, hasta que Sandra reacciona por fin, desvela sus sentimientos y pide a Ángel que se vayan a vivir juntos.
Finalmente ocurre un acontecimiento que también será trascendente a lo largo de esta segunda temporada, y es que Sandra (porque Eli no puede) y Jorge acuden a una boda a hacer el cátering y resulta que la novia es una enfermera del hospital donde trabajó Sandra, y que no guarda un buen recuerdo de ella. Al final la boda de estropea porque Sandra descubre al novio poniéndole los cuernos a la novia allí mismo y acaba contándoselo cansada de las puyitas que le va lanzando por lo mal que le va la vida al estar sin licencia y viviendo en un camping.
Y para acabar con el resumen del episodio, una perla de Eli: "La familia política se llama así porque está siempre jodiendo"
Saludos.