Buena película, sin más. Bien la ambientación, especialmente las escenas en una Tierra inspirada en los peores episodios del "Dust Bowl" americano de los años 30. Curiosamente, creo que faltó algo más de imaginación a la hora de presentarnos los mundos de la otra galaxia, que no ofrecían ningún plano particularmente interesante.
Magníficas interpretaciones por parte de un enorme Matthew McConaughey y una solvente Anne Hathaway - a la que veo que, siguiendo las órdenes de las revistas de tendencias americanas, es obligatorio odiar por razones que aquí desconocemos - con unos notables John Lithgow, Wes Bentley y sobre todo Casey Affleck (ya sabemos quién recibió el talento interpretativo de la familia
) y el acompañamiento más soso por parte de Matt Damon y Jessica Chastain. No es culpa suya: sus personajes eran indefendibles.
Porque aquí es donde la película hace aguas por todas partes: por el guión. No vamos a buscarle los tres pies al gato sobre los tropezones científicos de la película, ni elucubrar sobre las inevitables paradojas de los viajes temporales, pero hay al menos dos que no pueden soslayarse de ninguna manera porque la película se cimenta sobre ellos. Los comentaré en el diseccionado, pero vamos, que te tiran la peli por tierra.
En cuanto a los homenajes y referencias, sí, tiene muchísimas, pero eso ni quita ni pone. En "Castle" Nathan Fillion hace un montón de referencias friquis (entre ellas un montón de graciosos guiños a "Firefly") pero no es eso lo que hace de la serie un éxito. La gracia de Fillion, el interés de los casos y la magnífica química entre los protagonistas es lo que hacen que la serie funcione. Para una película es lo mismo.
El principal fallo para mí está en la motivación de los personajes. No consigo creerme ni por un momento ni a Damon ni a Chastain, no porque ellos lo hagan mal sino porque siento que si sus personajes fueran como se supone que son no habrían hecho las cosas que hacen en la película. Esta incongruencia entre cómo se supone que eres y cómo te comportas acaba restándole enteros a su trabajo y a toda la película. Si a todo eso le sumamos una parte emotiva que solo funciona bien en el primer tramo de la película, una falta de química evidente entre los astronautas exploradores y un final made in Hollywood - y no, no me refiero a la psicodelia multidimensional, sino a lo que viene después - pues la película se desinfla mucho.
Siendo una marcianada más grande, "Inception" y "The prestige" (¡qué mal le traducen a Nolan los títulos!) eran mucho más coherentes con sus propias reglas de juego y sobre todo, sus personajes resultaban mucho más verosímiles. En fin, que como cinta de aventuras no está nada mal (un 7/10 le he puesto) pero en cuanto a película en general está bien lejos de una obra maestra.