A mi no es que solo me ha gustado, sino que me ha encantado. Iba con buenas expectativas a la hora de verla y se han visto superadas. Ya desde un principio me atraía el reparto y la época en la cual se ambienta la películas. Y es que El Discurso del Rey supone una gran muestra de realización y de un trabajo actoral que roza el sobresaliente.
No solo es la historia del rey Jorge VI y su tartamudez, sino que también sirve para ver como le afecta en las relaciones sociales derivadas de su cargo, de como es un trauma infantil adquirido, de como las expectativas creadas alrededor de él aumentan ese tartamudeo y como le va pesando la carga de ser rey casi sin quererlo. Es una película que tiene una elaboración exquisita y muy cuidada, partiendo desde la sobria ambientación (me ha encandilado lo minimalista del estudio de Lionel), la música tan adecuada de Alexandre Desplat (el discurso final con la Sinfonía nº 7 de Beethoven es una maravilla), el guión que funciona con un ritmo atrayente y las interpretaciones.
Colin Firth está inmenso, creo que ese el califativo exacto e incluso traslada a uno mismo el pánico que le tiene al micrófono. Es imprescindible oirlo en versión original para apreciar todos sus matices. Incluso consigue que esa timidez y tartamudeo no lleguen a ser estupidez, sino como una interpretación sobre superación personal con una evolución en su personaje que consigue empatizar a quien lo ve. Recuerdo al Firth de "Orgullo y Prejuicio" y ya allí demostraba que es un actor que con gestos suaves, con la expresividad de sus ojos decía mucho. Aquí lo demuestra de nuevo con una actuación impecable. Me quedo con una frase de su personaje cuando ve un reportaje sobre Adolf Hitler (quien posiblemente sea el mayor orador político que jamás existido) hablando en alémán y una de sus hijas le pregunta: ¿Qué está diciendo? Y él le responde: No lo se, pero lo que dice lo dice muy bien. Y eso mientras lo mira absorto como envidiando la gran locuacidad de Hitler y eso que estaban casi a punto de entrar en guerra.
Geoffrey Rush vuelve a ofrecer otra genial interpretación. Se me ha hace difícil recordarlo en una mala actuación y aquí borda un personaje casi bufonesco pero con un oficio y carisma brutales, que incluso recuerda al entrañable profesor Higgins de "My fair Lady". Helena Bonham-Carter parece que vuelve a aquellos personajes de época en los cuales destacó y apoya muy bien al dúo protagonista. En cuanto al resto del reparto destacaría a Timothy Spall dando vida a un muy creible Churchill en cuanto a gestos y casi igualando el mismo tono de voz del verdadero Churchill. A Guy Pearce si que no lo he visto muy bien y no me ha parecido muy creible que fuera el hermano mayor de Colin en la peli. Y Michael Gambon lo poco que sale clava a Jorge V.
Lo que plantea la película es muy interesante de partida, ya que no solo se trata de que el rey supere su tartamudez sino que tiene que dar un discurso clave en la historia de su país en ese momento. Cualquier duda, pausa o desconfianza en la manera que lee ese discurso puede desmoralizar a una Gran Bretaña que confiaba plenamente en la capacidad de sus líderes de afrontar esa nueva guerra. Incluso dentro de ese tono dramático hay salpicado cierto punto de comedia que la hace más humana y que también como alguien tan poderoso puede tener un problema tan común. La puesta en escena es fantástica, incluso uno queda atrapado por esa dirección vigorosa tan clásica que llega al gran público sin renunciar lo más mínimo a lo que cuenta y a la calidad propia de la película. Es una mirada a la monarquía británica, sus costumbres y refelejando con era la sociedad en aquel tiempo. Y sobre el director Tom Hooper, magnífico, que más decir del director de esa miniserie tan buena como "John Adams". En fin, que he salido del cine muy contento y el Miércoles repito para verla otra vez.
9/10
PD: Y por supuesto muy superior a la peli del Feisbus
PD2: Ha sido muy curioso ver juntos en pantalla de nuevo a Jennifer Ehle y Colin Firth después de que protagonizaran ambos la miniserie "Orgullo y Prejuicio"