Una peli cojonuda. No se anda con miramientos y a los cinco minutos de metraje ya muestra una tensión latente que no suelta en los 100 minutos siguientes. Si habláramos de una película americana, Malamadre pasaría automáticamente a esa galería de villanos universales con carisma y que su sola presencia ilumina la pantalla a su paso. Incluso en los primeros planos donde solo le vemos de espaldas desprende ese aura que solo los grandes personajes consiguen transmitir. Además hay que destacar a los actores que interpretan al funcionario y a Tachuela (no tanto Carlos Bardem, al que le he visto alguna escena algo forzado), que junto al inmenso Tosar consiguen escenas de una inmensidad apabullante como la de la oreja o el momento donde se conocen los tres.
Por contra, no me parece una película que roce la perfección por lo burdo que en tramos muestra un guión bastante sólido pero que descuida algunos momentos, como precisamente la introducción al motín donde la pregunta que se hace todo el mundo es contestada ante un tribunal con gran simpleza para salvar el bache. ¿Por qué le dejamos en la celda y no en la enfermería? Pues por que sí y porque no se me ocurrió nada mejor para meter al funcionario en escena. Pasa, pero porque el resto de la cinta se mueve a cotas mucho más altas. Otra cosa que me patina es que aun perro viejo, a un superviviente de trinchera, a un tío duro de cojones como es Malamadre, llegue un chavalito que no ha pisado una carcel en su vida y se cuela doblada desde el principio.
Yo quería pensar que Malamdre le había calado desde el principio pero que le estaba dando cuerda para ver hasta donde era capaz de llegar y prescindir de él cuando considerara oportuno, pero no, un tío que sabe ganarse el respeto de los peores criminales en una prisión es burlado por un funcionario recién llegado.
Por otro lado, y creo que con esto termino con lo negativo, el personaje de Resines, aunque bien interpretado, me parece el más desdibujado de todo el plantel.
Ya no cojea el hecho de que un funcionario se coloque el traje de antidisturbios y salga a dar hostias a la puerta (no dentro, no) de la prisión, ya no el hecho de que dé una hostia a una embarazada que pasaba por ahí y que la mate, aparte de eso, que no contento con la que lía, todavía delata al otro al verse acorralado.
Pese al segundo tocho, me ha gustado mucho, que quede claro. Lo que me jode es ver una película muy bien realizada, muy bien interpretada y con un guión que te mantiene tieso en la butaca, que pierda credibilidad por lo tosco de algunas situaciones.
Para terminar dando otro punto positivo, la banda sonora cargada de graves daba si cabe más tensión.
8/10