Ozu es inconfundible, esta es la tercera pelicula que veo del director. Y ya se me hace inconfundible su clase de cine social nipon totalmente independiente que ha tantos críticos a emocionado y público conmovido. La historia es buena, no tiene puntos flacos por lo que el ritmo es bueno y es cortita además (hora y media). Un monton de actores ya los pude ver en; El sabor del sake, y ahora me encantan. No es que sean grandes actores pero si muy carísmaticos. Lo dicho, otra simpática cinta de Yasujiro que cualquier fan no deberia perderse.
8+/10