Al principio me resultó desconcertante o incluso aburrida. La vi empujado por los buenísimos comentarios que había oído sobre esta película y no daba crédito. Pero luego viene por fin la reunión con sus hermanas, la dichosa cena familiar y ahí comienza el ascenso, hasta que al desenlace ya por fin conecté con la película y pude disfrutarla. Sin duda mucho mejor que Magnolia, a la que no conseguí verle encanto alguno.
Tremenda la utilización de la música con las imágenes, según aumenta o desciende el ritmo de la situación y con escenas hilarantes como la del dueño del restaurante discutiendo con Sandler por haber destrozado los lávabos. Y tambén la escena de amor en la cama: "tienes la cara tan bonita que querría aplastártela"
y la tensión con la chica del teléfono... tiene puntos muy buenos.
No me pareció magistral, pero si que es una muy buena película y muy recomendable para ver un cine diferente, pero de calidad. Después de este papel, respeto mucho más a Adam Sandler, al que sólo creía capaz de bodrios.