Vendedor de bromas: ¿Una broma? Seguro que van a divertirse. Bromas que han hecho llorar a la Realeza. "Dinamarca no se había reído nunca tanto", The Stage. Una novedad, "Humphrey, el malote". Lo deja en la mesa, pulsa el botón y vomita. Viene con recambios. Jabón negro. Déjenlo en el lavabo y cuando se laven las manos, les saldrán hongos en los dedos. No se lo podrán sacar durante horas. Asuste a los más viejos. Serpientes de verdad. Una hernia de broma. Heridas de plástico, para romper el hielo en las fiestas. Horas de diversión con la Delicia de la Luna de Miel. Póngase jugo de mofeta en la cama. No olvidarán la noche de bodas. Se pega a la piel y con agua no se va. Déle una alegría a sus amigos, gas lacrimógeno. Tiene el mismo sabor y efectos que el de verdad. Deja ciego, paralítico o mata. O para beber, cómprese un muñequito con un pene de tamaño real. Orina cerveza caliente, ¡horas de diversión! O compre una máquina de hacer caca. Haga pasar vergüenza a sus invitados. Con sonido realista. O el nuevo camisón. En cuanto se lo pone, se funde. Ya verá qué cara ponen. Para romper el hielo en las fiestas picantonas.