La marca de whisky que anuncia el Sr. Harris en la película (Santori) es real y es la mayor marca de bebidas alcohólicas del Japón.

Cuando la chica va a los recreativos, ve a un japonés jugando a una recreativa tocando la guitarra, la canción que suena en la máquina es de un grupo punk muy famoso en Japón "The Blue Hearts".

Dice Bill Murray que se inspiró para su personaje en un cartel publicitario de Harrison Ford que vio al poco de llegar a Japón. “Su cara era el vivo retrato de la humillación. Era como si con el rostro pidiera perdón por estar haciendo aquello”.

Para convencer a Scarlett Johanson de que se pusiera para una escena unas bragas de seda, Sofia Coppola tuvo que ponerselas primero; la convenció.

El equipo hizo tantos amigos en Japón que al finalizar la película tuvieron que hacer tres fiestas de despedida.

A menudo se hacían “planos robados” (sin pedir permiso a instituciones ni gente) en la calle, pero en cierto lugar se les acabó el chollo al pedirles un yakuza dinero. Finalmente, los miembros japoneses del equipo les ayudaron a evitar las zonas controladas por los yakuza.

En la escena rodada en el restaurante Shabu-shabu los miembros del equipo se excedieron 10 minutos del tiempo pactado. El encargado del local y el dueño del mismo se sintieron deshonrados y engañados y apagaron las luces. La cultura nipona es muy orgullosa.

Sofia Coppola acudió un año antes del rodaje a Japón para grabar en vídeo lo que le parecía más importante que debía salir posteriormente en la película.