La Familia Savages
Director: Tamara Jenkins
Intérpretes: Laura Linney (Wendy Savage) / Philip Seymour Hoffman (Jon Savage) / Philip Bosco (Lenny Savage) / Peter Friedman (Larry) / Gbenga Akinnagbe (Jimmy) / Cara Seymour (Kasia) / David Zayas (Eduardo) / Debra Monk (Nancy Lachman)
Duración: 113 minutos
Sinopsis: Jon y Wendy deberán enfrentarse a la realidad de la responsabilidad familiar cuando tengan que empezar a cuidar a su padre enfermo. Durante la convalecencia de su padre empezarán a resurgir antiguas disputas. [...]
Lea más en su ficha

Estreno en España: 4 de Abril de 2008
Nota I.M.D.B.: 7,9/10 (2332 votos)

CRÍTICA

La familia Savages. Un retrato de la vida real.

Con “La familia Savages” nos encontramos ante una de esa películas que emanan humanidad por los cuatro costados. La película, escrita y dirigida por Tamara Jenkins, recibió una nominación a los Oscars de este año en la categoría de mejor guión original, amén de otras nominaciones y premios otorgados por festivales y asociaciones de profesionales del mundo del cine. La película es, de principio a fin, una retrato perfecto de la vida. Y, más específicamente, de esa parte de la vida que menos se muestra en un medio tan masivo como es el cine. Y es que “La familia Savages” gira entorno a la enfermedad que sufre el anciano padre de los protagonistas y a qué hacer con él el tiempo que le queda de vida. Pero no queda ahí la cosa, ni mucho menos. Este hecho no es más que el desencadenante, la excusa, para exprimir unos personajes complejos y atormentados. A raíz de ese reencuentro de los dos hermanos, ambos se ven obligados a permanecer juntos durante un tiempo, obligándoles así a convivir de nuevo y a conocerse más.

Con un principio ácido y mordaz, la directora nos sitúa en un entorno extraño y hostil. Una de esas colonias de hogares para personas mayores. Urbanizaciones de casas iguales donde todos los residentes son ancianos, y donde tienen infinidad de actividades y lugares de esparcimiento a los que acudir. Es en este sitio donde comienza la película, que no la historia que se nos quiere contar. Y es que la historia que se nos quiere contar parte de esa premisa para mostrarnos la relación, difícil y compleja, que existe entre los miembros de la familia Savage, un triángulo formado por el padre, (papel que interpreta Philip Bosco), el hijo mayor (papel interpretado por el genial Philip Seymour Hoffman), y la hija menor (interpretación a cargo de Laura Linney); de quienes hablaremos más adelante. Entre estos tres personajes existe una historia muy complicada marcada por el pasado. A medida que va avanzando el film el espectador va conociendo lo que de verdad une a esas personas, lo que hace que se relacionen de esa manera, lo que los hace actuar de ese modo. Sin embargo, y a diferencia de muchas otras películas, aquí todas esas cosas se nos sugieren, no se nos dicen. Aquí los personajes hablan y actúan como lo harían en la vida real. En la vida real no existe la necesidad de explicarlo todo, no hace falta que lo digamos todo con palabras, hay cosas que se sobreentienden y que se basan en el background que cada persona posee. Conseguir que los personajes de una película transmitan estas sensaciones es muy complicado de conseguir. Siempre existe una cierta tendencia a poner en boca de los personajes demasiada información. En esta película ocurre algo mágico: los personajes dicen lo que “deberían” decir, ni más ni menos. Es así como, poco a poco, se va haciendo partícipe al espectador de las vidas de esos personajes, vamos entrando en su universo, les vamos comprendiendo y aceptando, vamos descubriendo qué han pasado, y sufrido, hasta llegar a ese punto.

(Mas imágenes en su galería)

Y ya que estamos hablando de lo verosímil de los personajes aprovechar para destacar la magistral actuación del trío protagonista. Con un genial, una vez más, Philip Seymour Hoffman dando vida a un doctor en filosofía en pleno proceso de escritura de un libro y a una brillante Laura Linney, increíblemente cercana y humana, transmitiendo todo el dolor y la soledad por la que está pasando. Genial también el tercer ángulo de este triángulo interpretativo, Philip Bosco, perfecto en su papel de anciano cansado de la vida. Se trata de unos personajes bien definidos y con un arco evolutivo muy trabajado y muy realista. Tamara Jenkins consigue crear unos personajes que podríamos encontrarnos cualquier día por la calle, en un parque, en el metro…

Otro acierto de "La familia Savages" es su tono, mezcla de comedia y drama. Y es que, además de la relación entre los tres personajes, la película también nos muestra lo difícil que es afrontar la etapa final de la vida. El film reflexiona entorno a lo complejo y difícil que es la toma de decisiones en ese momento, pero lo hace con un punto irónico que hace que entre mejor al espectador. Y no es que se nos endulce la historia gratuitamente, sino que se nos muestra con un cierto tono ácido que lo dota de aún más verosimilitud, le da más peso dramático incluso.

En definitiva, una de esas pequeñas películas que hay que ver. Una película real y auténtica como la vida misma. Una película que hará reflexionar al espectador sobre su papel en el mundo, sobre cómo es su vida, sobre cómo le gustaría que fuera, y sobre cómo le gustaría pasar sus últimos años de vida. Una película necesaria.

LO MEJOR: Toda la película.
LO PEOR: Que no la verá toda la gente que debería verla.